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Todo niño debería tener su ‘mamá y papá’
El obispo más nuevo del país envió su primera carta a su rebaño en la diócesis de Waterford & Lismore instándolos a votar en el próximo referéndum sobre el matrimonio que, enfatizó, “tiene enormes implicaciones”.
En su carta del fin de semana, el obispo Phonsie Cullinan cuestionó si votar Sí está complaciendo los deseos de los adultos sobre los derechos de los niños.
“El mensaje con el que nos bombardean es que todos somos iguales. Esto es cierto: todos somos iguales en dignidad, pero no todos somos iguales. Los hombres y las mujeres son diferentes”, dijo.
El nuevo obispo subrayó que los niños son diferentes a los adultos como la unión de un hombre y una mujer es diferente a cualquier tipo de relación entre dos hombres o dos mujeres.
“Un hombre y una mujer se unen para traer nueva vida al mundo y todo niño tiene derecho a un padre y una madre (ya sean naturales o adoptivos)”, afirmó.
Le dijo a su rebaño que “solo el sentido común nos dice que cada niño debe tener su ‘mamá y papá’. Este ha sido el camino desde los albores de la civilización en todas las culturas y en todos los continentes”.
El obispo Cullinan subrayó que como ni la Iglesia ni el Estado inventaron el matrimonio, tampoco pueden cambiar su naturaleza.
Si se aprueba el referéndum del 22 de mayo, significará que, de acuerdo con la ley más alta del país, un ‘matrimonio’ entre dos hombres o dos mujeres será igual en todos los aspectos al matrimonio entre un hombre y una mujer, advirtió.
La reforma dará el visto bueno constitucional a la reciente Ley de Niños y Relaciones Familiares que propone eliminar toda mención de términos como ‘padre’ y ‘madre’ y hacer iguales todos los tipos de ‘familia’, dijo el nuevo prelado.
Reconociendo que la vida familiar en Irlanda ya está bajo presión, el obispo dijo que saludaba a todos los padres solos que, a menudo heroicamente, crían a sus hijos en circunstancias difíciles.
Se preguntó si la enmienda mejoraría o empeoraría la vida familiar.
De los 193 países de las Naciones Unidas, solo 17 permiten el matrimonio entre personas del mismo sexo. “Eso es menos del 9%, la mayoría internacional no está a favor”, enfatizó.
“Por favor, no piensen que critico de ninguna manera a las personas homosexuales a las que cuido como a todos. Cristo nos llama a amar a todos y tratar a todos con igual compasión y respeto”, apeló el obispo Cullinan.
Destacó que “hay mucha gente homosexual que no está para nada de acuerdo con esta enmienda”.
El obispo Cullinan planteó una serie de preguntas para que la gente pensara:
– Los padres que sostienen que el matrimonio es sólo entre un hombre y una mujer, ¿serán libres de enseñárselo a sus hijos?
– ¿Toda escuela, católica, protestante o musulmana, etc., será libre de enseñar según su ethos?
– ¿Las personas que trabajan en agencias de adopción y otros trabajos que tratan con el público serán libres de actuar de acuerdo con su conciencia?
– ¿Tendrán los términos ‘padre’ y ‘madre’ algún significado real en el futuro?
Concluyó afirmando que todos queremos lo mejor para la sociedad y para nuestros hijos. “Pero consideremos con mucho cuidado qué es exactamente lo mejor”.
