Sexto Domingo del Tiempo Ordinario – Las Bienaventuranzas – S.
Sexto Domingo del Tiempo Ordinario – Las Bienaventuranzas – San Lucas 6, 17. 20-26 – 17 de febrero de 2019
San Lucas 6, 17
17. Bajando con ellos, se detuvo en un plano. Había un gran número de sus acólitos y una gran multitud de personas de Judea, Jerusalén, la zona del mar, Tiro y Sidón, que habían venido para escucharlo y ser sanados de sus anomalías de la salud”.
San Lucas 6, 20-26
20.Entonces miró a sus discípulos y ha dicho: “¡Bienaventurados los pobres, porque tu es el Reino de Dios!* 21.¡Bienaventurados los que en este momento tenéis hambre, porque seréis saciados! ¡Bienaventurados los que en este momento lloran, pues se regocijarán! 22 Bienaventurados vais a ser en el momento en que los hombres os odien, les expulsen, os insulten, y en el momento en que rechacen vuestro nombre como infame a raíz del Hijo del Hombre. 23. Gozaos en ese día y alegraos, pues grande es vuestra recompensa en los cielos. Así trataban sus progenitores a los profetas. 24. Mas ¡uy de vosotros, ricos, que tenéis tu consuelo! 25. ¡Ay de nosotros los que estáis hartos, porque volveréis a tener apetito! ¡Uy de ustedes que ahora ríen, pues gemirán y llorarán! 26. ¡Ay de vosotros, cuando los hombres os alaben, por el hecho de que de esta forma hacían sus progenitores con los falsos profetas!
Fuente: Biblia Ave María
“Este domingo de las Bienaventuranzas nos recuerda que estamos contentos de poner nuestra seguridad en Dios y nuestra esperanza en la persona de Jesús. Cristo desea la alegría para todos, y nuestro corazón está invitado a permanecer siempre cerca de él, abriéndose a la luz de su resurrección. El Señor es la roca que nos cobija y la fortaleza que nos protege”. (Liturgia diaria)
“Jesús proporciona a los acólitos un panorama del Reino de Dios que Él está implantando. Las bienaventuranzas y las “desventuras” son realidades que ya se irán corroborando a lo largo de esta vida. Los pobres son personas que sufren privaciones severas. El Reino de Dios es una línea divisoria de aguas. Por un lado, están los que admiten a Jesús y la práctica del amor. Por otro, los que rechazan a Jesús y su iniciativa de vida y independencia para todos”. (Día a Día – Ed. Paulus)
El Papa emérito Benedicto XVI explicó que “las bienaventuranzas se basan en el hecho de que existe una justicia divina, que exulta a los que han sido humillados injustamente y envilece a los que se han exaltado a sí mismos (cf. L.c. 14, 11). De hecho, el evangelista Lucas, tras los 4 “bienaventurados vosotros”, añade cuatro admoniciones: “¡Uy de nosotros los ricos… ay de nosotros los que estáis saciados… uy de vosotros que en este momento reís!” y “¡Ay de nosotros en el momento en que todos hablan bien de nosotros» porque, como dice Jesús, las cosas se invertirán, los últimos van a ser los primeros y los primeros serán los últimos (cf. L.c. 13, 30)”. (14/02/10)
“Lo que asistencia no es sufrir estos males, sino más bien soportarlos en el nombre de Jesús, no solo con espíritu sereno, sino asimismo con alegría”. (San Agustín)
El Papa Francisco lo afirmaba así: “El estilo cristiano es el de las Bienaventuranzas: mansedumbre, humildad, paciencia en el padecimiento, amor a la justicia, capacidad de soportar la persecución, no evaluar a el resto… Y ese es el espíritu católico, el estilo cristiano. Si tienes ganas de saber de qué forma es el estilo cristiano, para no caer en este estilo acusatorio, el estilo mundano y el estilo egoísta, lee las Bienaventuranzas. Y este es nuestro estilo, las Bienaventuranzas son los odres nuevos, son el camino para llegar. Para ser un buen cristiano debemos tener la capacidad de recitar el Credo de corazón, pero también de recitar el Padrenuestro de corazón”. (21/01/19)
El Catecismo enseña (§1717): “Las Bienaventuranzas dibujan la imagen de Cristo y describen su caridad; manifiestan la vocación de los leales socia a la gloria de su Pasión y Resurrección; alumbrar las acciones y actitudes propias de la vida cristiana; son promesas paradójicas que sustentan la esperanza en las preocupaciones; comunicar las bendiciones y recompensas ya oscuramente adquiridas por los discípulos; son iniciados en la vida de la Virgen María y de todos y cada uno de los santurrones”.
Conclusión:
“Los evangelistas Mateo y Lucas reportan las “Bienaventuranzas” como un discurso especial de Jesús a las multitudes. Es interesante ver que todo cuanto parece ser una búsqueda humana, como la riqueza, la saciedad, el prestigio, la prominencia popular, se presenta hoy como un signo de debilidad espiritual. Por tanto, el hombre está llamado a buscar sentimientos espirituales superiores, caracterizados por la renuncia personal en vista de la riqueza del corazón de su prójimo”. (Padre Guido Mottinelli)
Oración:
“Estimados amigos, dirigámonos en este momento a la Virgen María. Todas las generaciones la proclaman “bienaventurada”, pues ella creyó en la buena nueva que el Señor le anunciaba (cf. L.c. 1, 45.48)”. (Papa Emérito Benedicto XVI)
Jane Amábile – Con. Divino Espíritu Santo
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Esperamos que le gustara nuestro articulo Sexto Domingo del Tiempo Ordinario – Las Bienaventuranzas – S.
y todo lo relaciona a Dios , al Santo , nuestra iglesia para el Cristiano y Catolico .
Cosas interesantes de saber el significado : Dios