“Ser signo de la cercanía de Dios en el mundo”, pide D.

Erika Augusto

Rocinha (RJ) – Este sábado 25 de marzo, Solemnidad de la Anunciación del Señor, la Provincia Franciscana de la Inmaculada Concepción dio la bienvenida a otro diácono. La comunidad de la Paróquia Nossa Senhora da Boa Viagem celebró con alegría la ordenación diaconal de Fray Alan Maia, concluyendo de esta forma una intensa semana de misiones, visitas, celebraciones y muchas ocupaciones.

La Parroquia, ubicada en Rocinha, se llenó de fieles. Varios debieron seguir la Misa en una pantalla grande, instalada fuera de la iglesia para que todos tengan la posibilidad de seguir la celebración. Aparte de la familia de fray Alan Maia, también estuvieron presentes amigos de Bangu, el vecindario de origen del fraile, y de Nilópolis, donde trabajó. La Misa comenzó a las 18 horas y fue presidida por el Arzobispo de la Arquidiócesis de São Sebastião do Rio de Janeiro, Don Orani João Tempesta, y los concelebrantes Fr. César Külkamp, ​​Vicario Provincial, Fr. Sandro Roberto da Costa, Vicario Parroquial; Fr. Diego Melo, Coordinador del Servicio de Animación Vocacional (SAV). Monjes de las Fraternidades del Convento de Santo Antônio, Nilópolis, São João do Meriti, Convento de São Francisco de São Paulo, frailes alumnos de teología de Petrópolis, sacerdotes de la Congregación de los Legionarios de Cristo, sacerdotes diocesanos y seminaristas, tal como dos pobres Clarisas del Monasterio Nuestra Señora de los Ángeles.

En su homilía, Dom Orani destacó la Solemnidad celebrada este 25, la Anunciación del Señor. “Esto no es solo un hecho del pasado. El Señor también está presente hoy en medio de todos nosotros. Dios está aquí en Rocinha. Dios habita entre nosotros”, ha dicho el Arzobispo, quien añadió: todos están llamados a la misión, transformando de este modo la realidad donde viven.

El arzobispo también resaltó que la misión de todo católico bautizado es ser signo de la cercanía de Dios, y subrayó la relevancia de la opción de los franciscanos por la pobreza y la sencillez.

En el instante de la acción de gracias, Fr. César agradeció al Arzobispo por su presencia en la celebración, y leyó el mensaje del Ministro Provincial, Fr. Fidêncio Vanboemmel, ofertando solidaridad a toda la Fraternidad, que vive un momento especial con la hospitalización de Fr. Márcio de Araújo Terra, por un accidente doméstico esta semana y está en la UCI.

Conmovido, fray Alan agradeció a su familia, a los monjes ahora toda la comunidad de Rocinha, que lo acogieron y prepararon para vivir intensamente este día de celebración. Fray Sandro reforzó el agradecimiento y añadió: “No olvidaremos todo cuanto ha hecho la comunidad estos días”.

Tras la Misa, todos fueron convidados a una recepción en el salón parroquial.