Seminario de St. John, Boston / Arquidiócesis de Boston
Washington DC, 11 de agosto de 2021 / 12:03 p. m. (CNA).
Los seminarios católicos en el noreste exigen que sus seminaristas se vacunen contra el COVID-19 antes de que comience el próximo semestre.
Mt. Saint Mary’s University en Emmitsburg, Maryland, es una de las universidades que requiere que los estudiantes y seminaristas se vacunen antes de ingresar al campus en agosto de 2021.
A los estudiantes se les dio al menos unos meses para solicitar una exención religiosa o médica al mandato de la vacuna COVID-19, pero la fecha límite era el 30 de julio, dijo a CNA Donna Klinger, directora de relaciones públicas y comunicaciones de la universidad, en una llamada telefónica.
A los estudiantes que aún buscan una exención no se les permitirá regresar físicamente al campus, dijo Klinger a CNA, pero tendrán la oportunidad de trabajar con la administración de la universidad para intentar el aprendizaje en línea. No todas las clases universitarias se ofrecen en línea.
En el Seminario St. John’s en Boston, el vicerrector Fr. Thomas Macdonald dijo que se “espera” que los seminaristas sean vacunados.
El trabajo de un sacerdote requiere estar cerca de la gente, señaló Macdonald, y le dijo a CNA que un sacerdote necesita acceso a lugares que albergan a personas vulnerables, como hogares de ancianos. St. John’s permite que los seminaristas opten por no vacunarse, pero en tales casos el seminarista debe explicar su razón para hacerlo.
La mayoría de los seminaristas ya están vacunados, según el vicerrector.
Macdonald le dijo a CNA que solicitar exenciones religiosas a la vacuna también plantea “cuestiones teológicas”, ya que la Congregación para la Doctrina de la Fe del Vaticano ya aclaró que el uso de vacunas COVID-19 con conexiones a líneas celulares derivadas de abortos no es inmoral.
Según la misma nota doctrinal de la congregación de diciembre de 2020, el Vaticano también afirmó que “la vacunación no es, por regla general, una obligación moral” y “por lo tanto, debe ser voluntaria”. La nota prosiguió reconociendo el rechazo concienzudo a las vacunas, explicando que quienes rechacen vacunas contra el COVID-19 con conexiones a líneas celulares derivadas de abortos, “por razones de conciencia”, deben tomar las debidas precauciones para evitar la transmisión del virus.
La Universidad de Seton Hall exige que sus estudiantes y seminaristas también se vacunen contra el COVID-19. Estos estudiantes aún pueden optar por no participar “mientras las vacunas COVID-19 estén autorizadas en casos de emergencia”.
Aunque las tres vacunas autorizadas para su uso en los Estados Unidos solo tienen una autorización de uso de emergencia de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de los EE. UU., según se informa, la administración podría emitir la aprobación total de la vacuna COVID-19 de Pfizer en unas semanas.
“Reconocemos las preocupaciones legítimas de las personas de la comunidad de Seton Hall en torno al COVID-19, y existen exenciones por creencias religiosas, condiciones de salud preexistentes o razones personales, mientras que las vacunas contra el COVID-19 están autorizadas en casos de emergencia”. dijo la directora de relaciones con los medios de la universidad, Laurie Pine, a CNA en un comunicado por correo electrónico.
Una autorización de uso de emergencia le permite a la FDA acelerar la aprobación de un producto médico durante emergencias de salud pública.
En su declaración del 2 de julio sobre los mandatos de vacunas, el Centro Nacional Católico de Bioética advirtió contra los mandatos, especialmente cuando las vacunas contra el COVID aún no han sido aprobadas por completo por la FDA. El centro dijo que “sería una desviación radical de la práctica anterior imponer un mandato que involucre una vacuna no aprobada disponible solo bajo una Autorización de uso de emergencia”.
No está claro si Seton Hall ya no permitirá exenciones después de que las vacunas COVID-19 estén completamente aprobadas
