San Pedro Apóstol, Patrono de la Ciudad de Roma
San Pedro Apóstol, Patrono de la Ciudad de Roma
Su nombre era Simón y fue Jesús quien lo llamó Pedro. Nativo de Betsaida, vivió en Capernaum y fue pescador en el lago Tiberíades. El Profesor lo invitó a seguirlo, junto con su hermano André; con Santiago y Juan presenciaron algunos hechos esenciales: la resurrección de la hija de Jairo, la Transfiguración, la agonía en el Huerto de los Olivos.
Caminando junto al Mesías, Pedro emerge como un hombre simple, inquieto ahora ocasiones aun impulsivo. De vez en cuando habla y actúa representando a los Apóstoles; no duda en solicitarle a Jesús explicaciones y aclaraciones sobre su predicación o parábolas, tal como preguntarle sobre diversas cuestiones.
Fue el primero en contestar al Profesor, en el momento en que preguntó a los discípulos: “¿Asimismo nosotros deseáis iros?”. El Maestro logró esta pregunta después de charlar en la Sinagoga de Capernaum, ocasionando confusión entre los discípulos; en verdad, varios de ellos, a partir de ese instante, decidieron no proseguirlo más. Entonces Simón Pedro respondió: “Señor, ¿a quién iremos? Tú solo tienes expresiones de vida eterna; suponemos y sabemos que tú eres el Santurrón de Dios” (Jo 6,67-68).
la confesión de pedro
En Cesarea de Filipo, en el momento en que Jesús pregunta a sus fieles “Y nosotros, ¿quién afirmáis que soy yo?”, Pedro afirma: “Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente” (Mt 16,16). Y Jesús le dijo: “Te digo que tú eres Pedro y sobre esta roca edificaré mi Iglesia, y las puertas del infierno no prevalecerán contra ella. Y te daré las llaves del Reino de los Cielos: todo cuanto ates en la tierra va a quedar atado en los cielos, y todo cuanto desates en la tierra va a quedar liberado en los cielos”. (Mt 16,18-19).
Esta es la labor que recibió Pedro: gobernar la Iglesia. Los Evangelios revelan que Jesús quiso confiar su Iglesia a un pescador instintivo y poco educado, que en ocasiones no sabía ver la intención de Dios: protestaba cuando Jesús charlaba de su Pasión; no deseaba que Jesús le lavara los pies en la Última Cena, porque era un gesto tan humilde por la parte del Maestro; negó, tres ocasiones, comprender a Jesús, después de haber sido capturado.
Sin embargo, los Apóstoles reconocen el papel que Jesús le confió y toma iniciativas distintas. En la mañana de Pascua, informado por María Magdalena de que el cuerpo del Maestro había desaparecido del sepulcro, se dirigió apuradamente con otro acólito. Pero este, habiendo llegado antes que él, por respeto dejó entrar primero a Pedro.
la mision de pedro
Tras la Resurrección, los Apóstoles se reunían en cenáculos, donde en ocasiones se les aparecía el Maestro. Cada uno de ellos retoma su propia vida diaria; Pedro, vuelve a tu barca y redes. Fue exactamente después de toda una noche sin pescar que el Maestro se le apareció de nuevo (Jo 21,3-7); le solicita que apaciente a su rebaño y le predice con qué muerte sería glorificado (Juan 21, 15-19).
Tras la Ascensión, Pedro se convierte en el punto de referencia de los Apóstoles y de los primeros seguidores de Cristo; comienza a charlar públicamente, predicar y sanar. Fue citado, detenido y puesto en libertad varias veces por el Sanedrín, obligado a aceptar la autoridad con la que charlaba; y la multitud, entusiasmada a su alrededor, aumentaba cada vez más y más.
Pedro comienza a ir de ciudad en localidad, transmitiendo la Buena Novedosa. Pero siempre y en todo momento regresa a Jerusalén; allí, un día, Pablo se le aparece a él ahora los demás Apóstoles, hablando de su conversión.
Pedro y Paulo toman entonces caminos distintas, sin escatimar sacrificios en los diferentes recorridos. Sin embargo, ambos siempre y en todo momento cruzan las calles de Jerusalén. Pedro confronta mucho a Paulo, acepta sus visualizaciones y consideraciones; con él discute también las orientaciones que debe adoptar la Iglesia naciente. Al final, los dos Apóstoles se rencuentran en Roma.
obispo de roma
Pedro asegura la fe de la comunidad cristiana y la dirige. A lo largo de la persecución de Nerón, fue detenido y luego crucificado cabeza abajo, a su intención. Sin embargo, Pablo fue condenado a muerte y decapitado por la corte romana. Según la tradición, el calvario de los 2 pilares de la Iglesia tuvo lugar exactamente el mismo día: 29 de junio de 67. Pedro murió en el Circo de Nerón, en la Colina del Vaticano, y Pablo en la Vía Ostiense. Sobre sus tumbas se levantó la Basílica de San Pedro y la Basílica de San Pablo extramuros.
Fuente: sitio web del Vaticano
Como esto:
Cargando…
Entrada archivada bajo: Reflejo de la Palabra.
Esperamos que le gustara nuestro articulo San Pedro Apóstol, Patrono de la Ciudad de Roma
y todo lo relaciona a Dios , al Santo , nuestra iglesia para el Cristiano y Catolico .
Cosas interesantes de saber el significado : Dios