Reflexión Dominical: Las Últimas Realidades

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Reflexión Dominical: Las Últimas Realidades

El tema de la liturgia de este domingo es el señorío de Dios sobre la historia.

Los que fueron seguidores del Bien, en el momento en que mueran, van a ir a la Vida, el resto, los que fueron opresores de sus hermanos, van a ir a la vergüenza eterna.

ciudad del Vaticano

El tema de la liturgia de este domingo es el señorío de Dios sobre la historia.

Frecuentemente pensamos, influidos por innumerables hechos, que la vida prosigue su curso, independientemente de la acción de Dios y que el Señor nos mira, cuando nos mira, con indiferencia, o aun sin importarle lo que hacemos o sufrimos.

La lectura del Libro de Daniel y el Evangelio de Marcos nos dicen precisamente lo contrario y con un lenguaje un poco excepcional para nosotros, el lenguaje apocalíptico.

La primera lectura, la de Daniel, quiere insistir en que el pueblo enfrente la opresión, la resista, venga de donde venga. Él dice que esos cuyos nombres están escritos en el Libro van a ser salvos. ¿Pero qué libro es este? No es un libro, pero el lenguaje apocalíptico quiere notificarnos que Dios es el Señor de la Historia, todo le resulta popular y todo, sea lo que sea, se convertirá en beneficio de sus hijos.

Naturalmente, los que fueron seguidores del Bien, en el momento en que mueran, irán a la Vida, los demás, los que fueron opresores de sus hermanos, van a ir a la vergüenza eterna.

El Evangelio muestra a Jesús hablándonos de discernimiento, de de qué forma discernir el momento de Dios en nuestra vida.

En la historia de el día de hoy somos llevados al discernimiento en el momento en que suceden situaciones catastróficas en nuestras vidas.

Marcos asimismo nos dice que Dios es el Señor de la historia.

Hace referencia al Hijo del Hombre, a su venida.

Su deseo es animarnos con el poder de Dios que actúa en la historia para salvarnos y juzgar a los que se oponen a su Reino de justicia, paz y verdad.

Si somos seguidores del Hijo del Hombre, esto es, de Jesucristo, debemos entrenar la justicia en nuestra vida y batallar por la paz y la realidad.

Al final, se nos solicita que seamos hombres y mujeres que adoran a sus semejantes, que los tratan como hermanos y hermanas.

El artículo nos habla de realidades que serán, anteriormente, como el sol, la luna, las estrellas y las fuerzas del cielo; al mismo tiempo, nos muestra el futuro, representado por las ramas verdes de la higuera, ¡signos de que el Reino de Dios ahora está entre nosotros, aconteciendo, haciéndose situación!

No nos dejemos perturbar por los problemas y las aflicciones, sino sepamos que en el momento en que pasamos por estas experiencias bien difíciles y dolorosas, estamos bajo la mirada cariñosa de Dios, que candela por nosotros, que nos da su felicidad para vencer todo de esta.

Va a ser en estas vicisitudes que nos salvaremos, si en ellas nos comportamos como hijos suyos, tratando a el resto como hermanos.

Como esto:

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Etiquetas: Trigésimo Tercer Domingo del Tiempo Ordinario.

Esperamos que le gustara nuestro articulo Reflexión Dominical: Las Últimas Realidades
y todo lo relaciona a Dios , al Santo , nuestra iglesia para el Cristiano y Catolico .
Cosas interesantes de saber el significado : Dios