¿Por qué las imágenes sagradas están cubiertas con telas moradas?

La respuesta a esta pregunta es mucho más simple que su origen: la idea pedagógica y ritual de la Iglesia consiste en orientar los sentidos de los fieles también por medio de la visión hacia la centralidad de la pasión de Jesús. Ciertos llaman a esto “luto anticipado” por la muerte de Jesús, un término que no me atrevo a asegurar que es incorrecto.

Un aspecto que es requisito apuntar es que esta práctica, desde el misal promulgado por el Papa São Paulo VI, es facultativa. Solo pude presenciar esta práctica tras ingresar al seminario, por servirnos de un ejemplo, ya que en mi parroquia de origen no era costumbre, y en ese instante del campeonato ahora tenía 20 años. Hasta el misal promulgado por el Papa San Juan XXIII, la práctica era obligatoria.

Las imágenes de santos, particularmente, llaman la atención por su belleza, que trasciende el estilo artístico usado. Cuántas imágenes existen en iglesias y viviendas que, en un sentido estético más refinado, podrían llamarse incluso “feas”, pero que son depositarias de un cariño que atraviesa generaciones. Aun este afecto está invitado a dar paso al centro que es Jesús. A lo largo de todo el año litúrgico, el centro es Cristo, y en estos instantes vemos las acciones de Cristo reflejadas en la vida de los beatos.

Un tema discutido en este sentido es el instante en que se tapan las imágenes. He visto de todo: parroquias que cubren el Miércoles de Ceniza, parroquias que cubren la Semana Santa, parroquias que cubren el 5° Domingo de Cuaresma. De todos modos… Las tradiciones brasileñas, muy distintas, derrochan justificaciones, cada una con sus defensores y razonamientos. Humildemente comparto aquí lo que prescribe el misal: que las imágenes de los santurrones y la cruz sean cubiertas antes del 5° domingo de Cuaresma, vale la pena comprobar en el misal (p. 211). El quinto domingo no es una decisión al azar, sino que ahora mismo de Cuaresma disponemos lo que podríamos llamar una intensificación bíblica del sendero de Jesús hacia su gesto redentor. Desde entonces, la mirada recibe una enorme invitación a permanecer fija en Jesús, no solo la mirada física, sino más bien la mirada del alma.

Un elemento no muy claro es el origen de esta tradición. Lo que tenemos la posibilidad de decir de las fuentes es que antecede al siglo XVI, cuando el misal precedió al de San Juan XXIII, este último promulgado por San Pío V.

Un detalle a destacar es entender también, desde el misal, hasta en el momento en que se dejan tapadas las imágenes: las cruces de las iglesias hasta el final de la celebración de la Pasión del Señor (Viernes Beato) y las imágenes hasta el inicio de la Pascual. Vigilia (Sábado Beato).

Sabemos que la pregunta es opcional, pero como los significados son una catequesis, y la justificación no es pues “el cura dijo que es de esta forma” o porque “siempre se hizo”, es una iniciativa válida y pedagógica.

*Artículo del P. Hamilton Gomes do Nascimento (rector del Seminario de Filosofía de la Diócesis de Santo André/ párroco de la Parroquia Cristo Rei, en Diadema)