¿Por qué debemos multiplicar las bendiciones que recibimos de
En nuestra vida, medramos en la fe cuando practicamos las Expresiones de Jesús. Y si le pedimos a Dios consuelo en nuestras aflicciones, misericordia en nuestros descalabros, es a fin de que asimismo tengamos la posibilidad consolar a los que sufren.
En nuestra vida, crecemos en la fe cuando practicamos las Palabras de Jesús. Y si le pedimos a Dios consuelo en nuestras aflicciones, clemencia en nuestros descalabros, es a fin de que también tengamos la posibilidad consolar a los que sufren.
Los dones, gracias y bendiciones que nos llega de nuestro Padre celestial deben ser multiplicados en el mundo, llevados a los hermanos y hermanas que más lo precisan.
San Pablo comienza la segunda carta a los Corintios comentando de la consolación de los apóstoles:
“Bendito sea Dios, Padre de nuestro Señor Jesucristo, Padre de las misericordias. Dios de todo consuelo, que nos consuela en todas y cada una nuestras preocupaciones, a fin de que con el consuelo con que nosotros somos consolados por Dios, tengamos la posibilidad consolar a los que están en cualquier tribulación.”
(2Cor 1, 3-4)
En verdad, Dios es la fuente de nuestro consuelo. Solo en Él encontramos consuelo, fortaleza y promesa para cualquier situación. Dios no solo es bueno, Él es bondad, Él es clemencia. Y Dios da consuelo a todos. Y el mismo consuelo que recibimos de Él, la misma misericordia que nos llega del Padre, debemos darla también a nuestros hermanos.
Llevando a la práctica la Palabra
En la oración del Padre Nuestro decimos: perdónanos nuestras ofensas, como nosotros perdonamos a los que nos ofenden. Y en el Evangelio de Mateo, Jesús dice que “si perdonáis a los hombres sus ofensas, tu Padre celestial asimismo os disculpará a nosotros” (Mateo 6:14).
En nuestra vida, medramos en la fe cuando practicamos las Expresiones de Jesús. Y si le solicitamos a Dios consuelo en nuestras aflicciones, misericordia en nuestros descalabros, es para que asimismo podamos consolar a los que padecen y pasan por preocupaciones, es a fin de que podamos tener misericordia de los que yerran.
Y en el momento en que no entendemos de qué forma accionar, siempre y en todo momento debemos rememorar que Dios es amor, y el cariño ha de ser la respuesta. Por consiguiente, “sed misericordiosos, como tu Padre es misericordioso” (Lc 6,36).
Fuente: Aleteia
Pío
Pío
Esperamos que le gustara nuestro articulo ¿Por qué debemos multiplicar las bendiciones que recibimos de
y todo lo relaciona a Dios , al Santo , nuestra iglesia para el Cristiano y Catolico .
Cosas interesantes de saber el significado : Biblia