Papa Francisco: El Adviento nos muestra la esencia de
Papa Francisco: El Adviento nos muestra la esencia de
El Adviento es el tiempo que se nos ofrece para acoger al Señor que viene a nuestro acercamiento, para reconocerlo en nuestros hermanos y hermanas y aprender a amar. Re-planteamos ciertas catequesis del Papa Francisco para profundizar en el significado de este tiempo que inicia el nuevo año litúrgico
ciudad del Vaticano
Este domingo empieza el Temporada de Adviento que alcanzará su apogeo en Navidad. En el Ángelus del 3 de diciembre del año pasado, el Papa Francisco explicó que “el Adviento es el tiempo que se nos da para acoger al Señor que viene a nuestro encuentro, asimismo para contrastar nuestro deseo de Dios, para mirar hacia adelante y prepararnos al regreso de Cristo”. . Volverá a nosotros en la celebración de Navidad, en el momento en que recordemos su venida histórica en la humildad de la condición humana; pero viene dentro de nosotros tan con frecuencia como estemos dispuestos a recibirlo, y va a venir nuevamente al final de los tiempos para ‘juzgar a los vivos ahora los muertos’. Por eso, debemos estar observadores y esperar al Señor con la expectativa de hallarlo”.
Las Tres Visitas del Señor
Estas son las tres visitas del Señor a la raza humana (Ángelus, 27 de noviembre de 2016): “La primera visita fue la Encarnación, el nacimiento de Jesús en la gruta de Belén; la segunda tiene sitio en el presente: el Señor nos visita de forma continua, todos y cada uno de los días, camina junto a nosotros y es una presencia consoladora; al final tendremos la tercera, la última visita”, el acercamiento con Cristo en el Juicio Final, que el Papa recuerda citando el capítulo 25 del Evangelio de Mateo: “Tuve apetito y me disteis de comer; tuve sed y me disteis de beber; fui peregrino y me acogisteis; desvisto y me vestiste; enfermo y me visitaste; Estuve en la prisión y viniste a mí”. En la noche de la vida vamos a ser juzgados en el cariño.
Atenta y vigilante para acoger las oportunidades de amar
La convidación de Jesús en el tiempo de Adviento es que estemos atentos y vigilantes, para no desaprovechar las oportunidades de amor que él nos ofrece: “La persona atenta es aquella que, en la mitad del estruendos de todo el mundo, no se permite se deja llevar por la distracción o la superficialidad, pero vive plena y responsablemente, preocupándose por el resto frente todo. Con esta actitud percibimos las lágrimas y necesidades del resto y también tenemos la posibilidad de tomar conciencia de sus capacidades y características humanas y espirituales”. (Ángelus, 3 de diciembre de 2017)
En el mundo pero no del mundo
El Adviento nos hace ver al cielo, pero con los pies en la tierra: “La persona atenta se preocupa asimismo por el planeta, buscando contrastar la indiferencia y la crueldad presentes en él, y regocijándose en los tesoros de hermosura que no obstante existen y deben ser preservados . Se trata de tener una mirada comprensiva para admitir tanto las miserias y pobrezas de las personas y de la sociedad, como la riqueza oculta en las pequeñas cosas de cada día, precisamente donde el Señor nos ha puesto. El vigilante es aquel que admite la invitación a estar alarma, o sea, a no dejarse dominar por el sueño del desánimo, de la desesperanza, de la desilusión; y, al tiempo, rechaza la petición de tantas vanidades que llenan el planeta y tras las cuales, en ocasiones, se sacrifica el tiempo y la tranquilidad personal y familiar”. (Ángelus, 3 de diciembre de 2017)
“Estar atentos y vigilantes son los capitales para no seguir ‘alejándonos de los caminos del Señor’, perdidos en nuestros errores y nuestras infidelidades; estar atentos y observadores son las condiciones para dejar que Dios irrumpa en nuestra vida, para devolverle sentido y valor con su presencia llena de bondad y inocencia”
Las buenas batallas de la fe
Transcurrido un tiempo de Adviento, comienza nuevamente nuestro sendero hacia el Señor. Un camino hecho de alegría, pero asimismo de mal, de luz pero asimismo de oscuridad. El camino se convierte en pelea, es la buena lucha de la fe. El Papa Francisco dice: “Dios es más poderoso y más fuerte que cualquier cosa. Esta convicción da al fiel serenidad, valor y fuerza para perseverar en el bien frente a las peores adversidades. Incluso cuando se desaten las fuerzas del mal, los cristianos deben contestar al llamado con la frente en prominente, listos para resistir en esta guerra donde Dios va a tener la última palabra. Y va a ser una palabra de amor y de paz”. (Homilía para el Primer Domingo de Adviento en la Catedral de Bangui, 29 de noviembre de 2015)
Lo más importante es el encuentro con el Señor
El Adviento no indica lo esencial de la vida. “La relación con el Dios que viene a visitarnos da a cada gesto, a cada cosa una luz diferente, una importancia, un valor simbólico. Desde esta visión llega asimismo una convidación a la sobriedad, a no dejarse dominar por las cosas de este planeta, por las realidades materiales, sino más bien a gobernarlas. Si, por contra, nos dejamos condicionar y controlar por ellos, no tenemos la posibilidad de darnos cuenta de que hay algo mucho más esencial: nuestro acercamiento final con el Señor: y o sea importante. Esa, esa reunión. Y las cosas diarias deben tener ese horizonte, deben orientarse hacia ese horizonte. Este encuentro con el Señor que viene por nosotros”. (Ángelus, 27 de noviembre de 2016)
María nos transporta a través de Jesús
El Papa Francisco encomienda la humanidad a María: “Señora, Virgen de Adviento, ayúdanos a no considerarnos dueños de nuestra vida, a no soportar en el momento en que el Señor viene a cambiarla, sino a estar dispuestos para dejarnos visitar por Él, huésped aguardado y satisfactorio si bien esto trastorne nuestros planes”. (Ángelus, 27 de noviembre de 2017)
Esperamos que le gustara nuestro articulo Papa Francisco: El Adviento nos muestra la esencia de
y todo lo relaciona a Dios , al Santo , nuestra iglesia para el Cristiano y Catolico .
Cosas interesantes de saber el significado : Dios