Papa a los obispos de RD Congo: cercanía a Dios y
La última cita del Papa Francisco en la República Democrática del Congo en la mañana de este viernes (03) fue el acercamiento con los obispos en la sede de la Charla Episcopal Nacional del Congo (Cenco). El Papa empezó su discurso diciendo que era bueno pasar estos días “en vuestra tierra, que representa, con su enorme bosque, el ‘corazón verde’ de África, un pulmón para el planeta entero. Luego añade que esta inmensa extensión verde, el bosque, es también una imagen que charla de nuestra vida cristiana: “como Iglesia, necesitamos respirar el aire puro del Evangelio, despedir el aire contaminado de la mundanalidad, custodiar el corazón joven de fe”. “Así es como”, dijo, “me imagino a la Iglesia africana y veo a esta Iglesia congoleña: una Iglesia joven, activa, alegre, animada por el anhelo misionero, por el anuncio de que Dios nos ama y que Jesús es el Señor”. .
Una Iglesia que sufre por su pueblo
Luego reflexionó que sabía realmente bien que la red social cristiana en esta tierra desgraciadamente asimismo presenta otro rostro. “En efecto, tu rostro joven, luminoso y bello aparece surcado por la tristeza y el cansancio, en ocasiones marcado por el temor y el desánimo. Es la cara de una Iglesia que sufre por su pueblo”. “Con nosotros”, ha dicho el Papa, “veo a Jesús tolerando en la crónica de este pueblo crucificado y oprimido, trastornado por una crueldad que no perdona a absolutamente nadie”. Al tiempo, sin embargo, veo un pueblo que no ha perdido la esperanza, que abraza la fe con entusiasmo e imita a sus Pastores, que sabe volver al Señor y encomendarse a sus manos”.
2 dimensiones para el ministerio episcopal
Y refiriéndose a las dos realidades, el Papa pregunta: “¿De qué forma ejercer el ministerio en esta situación?”. Y recomienda la historia de Jeremías, un profeta llamado a vivir su misión en la mitad de la injusticia, las abominaciones y el padecimiento. “Pasó su vida anunciando que Dios nunca abandona a su pueblo y continúa sus planes de paz aun en ocasiones que semejan perdidas y también irrecuperables”. Pero este consolador aviso de fe lo vivió personalmente Jeremías: fue el primero en experimentar la proximidad de Dios. Solo de esta manera podría llevar a los demás una valeroso profecía de promesa. Vuestro ministerio episcopal vive asimismo entre estas dos dimensiones, de las que les deseo hablar: la proximidad de Dios y el profecía para el pueblo.
proximidad a Dios
Primeramente quisiese decir, ha dicho, “dejaos tocar y consolar por la proximidad de Dios”.
“Queridos hermanos obispos, cultivemos la cercanía al Señor para ser sus presentes creíbles y portavoces de su amor entre los pueblos”
“¡Es a través de nosotros que Él desea ungiros con el óleo del consuelo y de la esperanza! Vosotros sois la voz con la que Dios quiere decir a los congoleños: sois ‘un pueblo consagrado al Señor tu Dios’”. Ahondando en este punto, Francisco añadió: “Si cultivamos la proximidad a Dios, nos sentiremos atraídos hacia la multitud y nunca vamos a dejar de sentir compasión por esos que nos han sido confiados. Animados y fortalecidos por el Señor, nos transformamos por su parte en instrumentos de consolación y reconciliación para el resto”. Y concluye afirmando que “la proximidad a Dios nos hace profetas para los pueblos, capaces de sembrar la Palabra que salva en la historia herida de exactamente la misma tierra”.
La profecía para el pueblo.
“Para profundizar en este segundo punto, la profecía para el pueblo, volvamos a ver la experiencia de Jeremías. Tras haber recibido la Palabra cariñosa y consoladora de Dios, está llamado a ser ‘profeta de las naciones’”. Y recomendado:
“No tenemos la posibilidad de guardarnos la Palabra de Dios, no podemos contener su poder: es un fuego que quema nuestra apatía y enciende en nosotros el deseo de alumbrar a los que están en tinieblas”
Aclarando que “¡la Palabra de Dios es un fuego que arde por dentro y nos impulsa a salir! Esta es nuestra identidad episcopal: inflamados por la Palabra de Dios, saliendo al Pueblo de Dios, con celo apostólico!”. Y ha dicho a los obispos que están llamados a hacer oír su palabra profética “a fin de que las conciencias se sientan interpeladas y cada uno logre convertirse en personaje principal y responsable de un futuro diferente”. Entonces advirtió: “Esto no es una acción política. La profecía cristiana se encarna en tantas acciones políticas y sociales, pero esta no es tarea de los obispos y pastores en general. Es el anuncio de la Palabra para despertar conciencias, para denunciar el mal, para animar a los angustiados y agobiados”.
Proximidad y testimonio
“Es un aviso hecho no solo de expresiones, sino más bien también de proximidad Es un testimonio: proximidad primeramente a los curas, escucha a los agentes de pastoral, estímulo en el espíritu sinodal para trabajar juntos”.
“Y doy testimonio, pues los pastores han de ser los mucho más creíbles en todo, particularmente en el cultivo de la comunión, en la vida ética y en la administración de los bienes”
“¡Pastores!”, insistió el Papa, “la administración del obispo debe ser la del pastor: enfrente del rebaño, en la mitad del rebaño, tras el rebaño. Enfrente de la manada para marcar el camino; entre el rebaño para oler el rebaño, para no perderlo. Detrás de la manada para contribuir a los que van mucho más lentos y, de hecho, para dejar la manada por un tiempo solo para poder ver dónde encuentran comida. El pastor debe moverse en estas tres direcciones”.
Señales proféticas de su compasión por el pueblo
“Estimados hermanos obispos, les he compartido lo que sentía en mi corazón: cultivar la proximidad al Señor para ser signos proféticos de su compasión por su pueblo. Os solicito que no descuidéis el diálogo con Dios y que no dejéis apagar el fuego de la profecía por cálculos o posiciones equívocas con el poder, ni por una vida cómoda y rutinaria”.
En su saludo final a los obispos ha dicho: “Y habiendo llegado al final de este sendero, deseo expresarles todo mi agradecimiento a ustedes ya quienes lo prepararon aquí. Debiste trabajar un par de veces, pues la primera oportunidad se canceló la visita, pero sé que eres misericordioso con el Papa… ¡Muchas gracias!”.
Fuente: Página web de Noticias del Vaticano
Esperamos que le gustara nuestro articulo Papa a los obispos de RD Congo: cercanía a Dios y
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