Nueve mujeres que fueron ejemplares para la Iglesia y la
Hay quienes aseguran que las mujeres no tienen papeles importantes en la Iglesia. No obstante, desde el principio del cristianismo hasta nuestros días, Dios levantó mujeres que guiaron al pueblo de Dios, influyendo asimismo en el curso del papado. Conozca a nueve mujeres que fueron ejemplares para la Iglesia.
- La Virgen María
“Mujer, ¿depende de nosotros? Aún no llegó mi hora” (Jn 2,4), dijo Jesús a su Madre en las Bodas de Caná, en una boda a la que los dos habían sido invitados. Cristo escuchó a su madre, la primera mujer que acogió al Señor y motivó el primer milagro popular de la vida pública de Jesús.
Los primeros siglos del cristianismo están llenos de mujeres valientes que no vacilaron en dar la vida por Cristo, animando a otros cristianos a no desistir llegado el momento.
- Santa Hildegarda de Bingen
Posteriormente, durante la Edad Media, ya no se persiguió a la Iglesia, sino que se vivió una cultura machista, caracteristica de la época. Esto no fue impedimento para santa Hildegarda de Bingen (1098-1179), monja benedictina de origen alemán, que llegó a tener una secuencia de visiones místicas.
Escribió obras teológicas y morales de notable profundidad y fue declarada Doctora de la Iglesia por Benedicto XVI en 2012, adjuntado con San Juan de Ávila. Su popularidad hizo que muchas personas, incluidos obispos y abades, le solicitaran consejo.
“Cuando el emperador Federico Barbarroja provocó un cisma eclesial, oponiendo 3 antipapas al papa legítimo, Alejandro III, Hildegarda, inspirada en sus visiones, no vaciló en recordarle que también él, el emperador, estaba sujeto al juicio de Dios”, dijo el Papa Benedicto XVI en su audiencia general por este beato en 2010.
- Santa Catalina de Siena
Posteriormente aparecería otra mística y doctora de la Iglesia, Santa Catalina de Siena (1347-1380), que vistió el hábito de la tercera orden de Santurrón Domingo. En esta época, los papas vivían en Aviñón (Francia) y los romanos se quejaban de ser abandonados por sus obispos, amenazando con el cisma.
Gregorio XI logró un voto secreto a Dios de regresar a Roma y, al preguntar a Santa Catalina, ella le ha dicho: “Cumple tu promesa a Dios”. El pontífice se sorprendió por el hecho de que no le había dicho a nadie sobre el voto, y después el Papa cumplió su promesa y regresó a la Ciudad Eterna.
Después, en el pontificado de Urbano VI, los cardenales se distanciaron del Papa por su temperamento y declararon nula su decisión, designando a Clemente VII, que fue a residir a Aviñón. Santa Catarina envió cartas a los cardenales instándolos a reconocer al genuino pontífice.
El santurrón también escribió a Urbano VI, instándolo a conducir los inconvenientes con templanza y alegría, controlando su temperamento. Santa Catarina fue a Roma, a pedido del Papa, quien prosiguió sus instrucciones. El aanta también escribió a los reyes de Francia y Hungría para terminar al cisma. Tome un espectáculo de defensa del papado.
- Santa Teresa de Jesús
Con el apogeo del protestantismo, la Iglesia se dividió y se celebró el Concilio de Trento. Son los años de Santa Teresa de Jesús (1515-1582), monja contemplativa que marcó a la Iglesia con su reforma carmelitana.
A pesar de ser incomprendida, perseguida y hasta acusada en la Inquisición, su amor a Dios la impulsó a fundar nuevos conventos y decantarse por una vida mucho más austera, sin vanidades ni lujos. Sumergida muchas veces en éxtasis, nunca dejó de ser realista.
Siendo Santa Teresa D’Ávila relativamente inculta, dialogó con miembros de la realeza, personajes ilustres, miembros eclesiásticos y santos de su tiempo para proporcionarles consejos, recibir asistencia y hacer lo que ella se había propuesto. Se transformó en escritora mística y asimismo es Doctora de la Iglesia.
- santa rosa de lima
Al otro lado del mundo, en América, más precisamente en el Perú, Santa Rosa de Lima (1586-1617) tomó como modelo a Santa Catarina de Siena y se olvidó de quienes la procuraban por su gran belleza, para ser con la capacidad de vivir en la virginidad, sirviendo a los pobres y enfermos.
“Probablemente no hubo misionero en América que con su predicación lograra mucho más conversiones que las que Rosa de Lima obtuvo con su oración y sus mortificaciones”, dijo el Papa Inocencio IX al referirse a la primera santa de América.
San Juan Pablo II ha dicho de la santa que su historia fácil y austera fue “un testimonio elocuente del papel definitivo que jugó y juega la mujer en el anuncio del Evangelio”.
- Santa Teresa de Lisieux
Del amor de los esposos franceses Louis Martin y Zélia Guérin, canonizados en octubre de 2015, nació santa Teresa de Lisieux (1873-1897), doctora de la Iglesia y patrona universal de las metas.
Santa Teresa vivió sólo 24 años. Un año después de su muerte, basado en sus escritos, se publicó el libro “Historia de un alma”, que conquistó al mundo por el hecho de que dio a conocer cuánto había amado esta monja a Jesús.
“Teresa do Menino Jesus y también da Sagrada Faz es la más joven de los ‘doctores de la Iglesia’, pero su ardiente sendero espiritual manifiesta tal madurez, y las intuiciones de fe expresadas en sus escritos son tan vastas y profundas, que meritan un espacio entre los grandes maestros del espíritu”, dijo san Juan Pablo II sobre este beato.
El Papa Francisco asimismo ha comentado en varias oportunidades la profunda devoción que le une a este beato y ha compartido en uno de sus viajes que antes de cada viaje o frente a una incomodidad, acostumbra pedir “una rosa”.
- Santa Edith Stein
A lo largo de la persecución nazi en el siglo XX, brotó en Europa otra gran mujer, una charla del judaísmo, monja carmelita descalza y mártir, Santa Edith Stein, también conocida como Santa Teresa Benedita da Cruz (1891-1942).
Junto con otros judíos conversos, las autoridades la llevaron al campo de concentración de Westerbork en venganza por la declaración de protesta de los obispos católicos de los Países Bajos contra las deportaciones de judíos.
Santa Edith fue trasladada a Auschwitz, donde murió en las cámaras de gas, junto a su hermana Rosa, asimismo convertida al catolicismo, y otros muchos de su pueblo.
San Juan Pablo II afirmaría de ella: “Una hija de Israel, que a lo largo de la persecución de los nazis continuó, como católica, unida con fe y amor al Señor Crucificado, Jesucristo, y, como judía, a su pueblo. ”.
- Santa Teresa de Calcuta
El testimonio de santa Teresa de Calcuta (1910-1997) de servir a Cristo en los “más pobres de los pobres” enseñaba que la mayor pobreza no estaba en los suburbios de Calcuta, sino en los países “ricos” cuando faltaba el amor o en sociedades que dejaban aborto.
“Para lograr amar, hay que tener un corazón puro y hay que orar. El fruto de la oración es la profundización de la fe. El fruto de la fe es el cariño. Y el fruto del amor es el servicio a el resto. Esto nos lleva a la paz”, ha dicho el premio Nobel de la Paz de 1979.
En su canonización en octubre de 2016, el Papa Francisco mencionó que “Madre Teresa, durante toda su vida, fue una espléndida dispensadora de la misericordia divina, haciéndose disponible para todos, acogiendo y defendiendo la vida humana, de los no nacidos y de los abandonados y descartados. . Se comprometió en la defensa de la vida, proclamando incesantemente que ‘los que aún no han nacido son los más enclenques, los mucho más pequeños, los más miserables’”.
- Santa Gianna Beretta Molla
Para finalizar esta lista de enormes mujeres que cambiaron el mundo y la historia, recordamos a santa Gianna Beretta Molla (1922-1962). Esta santa italiana enfermó de cáncer y decidió continuar con el embarazo de su cuarto hijo, en vez de abortar, como le sugirieron los médicos para socorrer su vida.
Gianna estudió medicina y se especializó en pediatría. Su tarea con los enfermos se resumía en la siguiente frase: “Como el sacerdote toca a Jesús, de esta forma los médicos tocamos a Jesús en el cuerpo de nuestros pacientes”.
Se casó con Pietro Molla, con quien tuvo 4 hijos. Durante su vida, logró equilibrar su trabajo con su misión como madre.
Gianna murió el 28 de abril de 1962, a los 39 años, una semana después de ofrecer a luz. Fue canonizada el 16 de mayo de 2004 por el Papa Juan Pablo II, quien la nombró patrona de la defensa de la vida.
Fuente: ACI Digital
Pío
Pío
Esperamos que le gustara nuestro articulo Nueve mujeres que fueron ejemplares para la Iglesia y la
y todo lo relaciona a Dios , al Santo , nuestra iglesia para el Cristiano y Catolico .
Cosas interesantes de saber el significado : Biblia