Natividad del Señor – Misa de Vigilia – María dio a luz a un

Natividad del Señor – Misa de Vigilia – María dio a luz a un

“1.En ese tiempo apareció un decreto de César Augusto, ordenando un censo de toda la tierra. 2. Este censo se hizo antes del gobierno de Quirino en Siria. 3. Todos fueron a alistarse, cada uno de ellos en su ciudad. 4. Subió asimismo José de Galilea, de la ciudad de Nazaret, a Judea, a la ciudad de David, llamada Belén, por ser de la casa y familia de David, 5. para alistarse con su mujer María, que era embarazada. 6. Mientras ellos estaban allí, sus días se cumplieron. 7. Y ella dio a luz a su hijo primogénito, y lo envolvió en bandas, lo reclinó en una escena de la natividad; porque no había rincón para ellos en el mesón.* 8. Había pastores alrededor, que velaban y guardaban su rebaño en los campos durante las vigilias de la noche. 9. Un ángel del Señor se les apareció, y la gloria del Señor relució cerca de ellos, y estaban horrorizados. 10. El ángel les ha dicho: “No temáis, he aquí les traigo una buena nueva que será alegría para todo el pueblo: 11. el día de hoy en la Ciudad de David les ha nacido un Salvador, que es Cristo el Caballero. 12. Esto os servirá de señal: encontraréis un niño envuelto en pañales y acostado en un pesebre. 13.E subitamente ao anjo se juntou uma multidão do exército celeste, que louvava a Deus e dizia: 14.“Glória a Deus no mais alto dos céus e na terra paz aos homens, objetos da benevolência (divina).”Fonte: Bíblia Avemaría

“Alegrémonos todos en el Señor, porque ha nacido el Salvador de todo el mundo, verdadero gozo y felicidad para la raza humana. En la fragilidad del niño, Dios se hace humano para hacernos divinos; desciende a nosotros para elevarnos a Él. Celebremos su gracia y salvación en esta noche santa, resplandeciente con la Luz que viene del cielo y nos trae la paz sin fin”. (Liturgia diaria)

El Papa Francisco mencionó que “el Evangelio nos revela una paradoja: charla del emperador, del gobernador, de las considerables personas de la época, pero allí no se presenta Dios; no aparece en el salón noble de un palacio real, sino más bien en la pobreza de un corral; no en los hechos ilusorios, sino en la facilidad de la vida; no en el poder, sino más bien en una pequeñez que nos llama la atención. Y para encontrarlo hay que ir donde está: hay que agacharse, abajarse, hacerse pequeño”. (24 de diciembre de 2016)

“José y María fueron a Belém por el decreto de César Augusto, que ordenó el censo. Allí, María da a luz a su hijo, Jesús. El niño nace pobre y entre los pobres, y los primeros en recibir la buena nueva son los pastores, gente fácil y desvalorizada. Es el nacimiento de este niño pobre que festejamos en Navidad, que nos sugiere ir a vivir con sencillez, desinterés y alegría”. (Liturgia diaria)

El Papa Francisco explicó: “Los días de [Maria] dio a luz y dio a luz a su hijo primogénito, al cual envolvió en pañales y acostó en un pesebre, por el hecho de que no había lugar para ellos en la posada” (L.c. 2, 6-7). Con esta afirmación simple pero clara, Lucas nos lleva al corazón de aquella noche santa: María dio la luzMaría nos dio la luz”.

Dom Benedicto de Ulhôa Vieira enseñó de esta manera: “Entendemos quién es este que viene a nuestro encuentro y por qué viene. Estamos invitados en esta bendita noche a contemplar la escena de la sagrada familia en la pobreza de la gruta de Belén: José, el hombre fuerte y casto; María, la mujer, invocada por la liturgia griega como “Theotókos”, cuyo pecho “fue la primera ambulancia de Jesús”; el Niño durmiendo en el tierno abrazo de los brazos de su Madre. La Navidad es una noche feliz, por el hecho de que Dios no ha defraudado nuestra esperanza. Vino y se quedó con nosotros: ¡Emanuel!”

Conclusión:

En palabras del Papa Francisco: “Hoy ha nacido el Hijo de Dios: todo cambia. El Salvador de todo el mundo viene a hacerse partícipe de nuestra naturaleza humana: por el momento no estamos solos y abandonados. La Virgen nos proporciona a su Hijo como principio de vida nueva. La luz verdadera viene a iluminar nuestra vida, frecuentemente cerrada a la sombra del pecado. ¡Hoy volvemos a conocer quiénes somos! En esta noche, se nos hace claro el camino que tenemos que tomar para llegar a la misión. Ahora, todo temor y terror debe cesar, por el hecho de que la luz nos enseña el camino a Belén”. (24/12/18)

Oración:

“Movidos por este don gozoso, Niñito de Belén, te pedimos que tu llanto nos despierte de nuestra indiferencia, abra nuestros ojos a los que padecen. Tu inocencia despierta nuestra sensibilidad y nos hace sentir convidados a reconocerte en todos y cada uno de los que llegan a nuestras ciudades, a nuestras historias, a nuestras vidas. Que tu inocencia revolucionaria nos persuada a sentirnos invitados a proteger la esperanza y la inocencia de nuestro pueblo”. (Papa Francisco)

Jane Amábile – Con. Divino Espíritu Beato

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Esperamos que le gustara nuestro articulo Natividad del Señor – Misa de Vigilia – María dio a luz a un
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Cosas interesantes de saber el significado : Dios