Los 7 Sacramentos de la Iglesia Católica

Los 7 Sacramentos de la Iglesia Católica

Bautismo

sacramento del bautismosacramento del bautismo

El bautismo se comprende como el sacramento que abre las puertas de la vida cristiana a la persona mencionada, incorporándola a la comunidad católica, al enorme Cuerpo Místico de Cristo, que es la Iglesia misma. Este ritual de iniciación cristiana se acostumbra llevar a cabo con agua sobre el bautizado, mediante inmersión, efusión o aspersión. O, usando otras expresiones del Compendio del Catecismo de la Iglesia Católica, “el rito esencial de este sacramento consiste en sumergir al candidato en agua o en verter agua sobre su cabeza, mientras que el nombre del Padre y del Hijo y del se invoca al Espíritu Santo”. Bautismo significa sumergirse “en la muerte de Cristo y resucitar con él como nueva criatura”.

El bautismo perdona el pecado original y todos y cada uno de los errores personales y las penas debidas al pecado. Deja a los bautizados participar en la vida trinitaria de Dios a través de la gracia santificante y la incorporación a Cristo ya la Iglesia. Asimismo confiere las virtudes teologales y los dones del Espíritu Santo. Una vez bautizado, un cristiano es para siempre un hijo de Dios y un miembro inalienable de la Iglesia y asimismo forma parte para toda la vida a Cristo.

Aunque el Bautismo es fundamental para la salvación, los catecúmenos, todos los que mueren por la fe (Bautismo de sangre), […] todos aquellos que, bajo el impulso de la gracia, sin comprender a Cristo y a la Iglesia, buscan con sinceridad a Dios y se esmeran por cumplir su intención (Bautismo de deseo), consiguen obtener la salvación sin ser bautizados por el hecho de que, según la doctrina de la Iglesia Católica, Cristo murió por la salvación de todos. En lo que se refiere a los niños que mueren sin ser bautizados, la Iglesia en su liturgia los encomienda a la clemencia de Dios, que es sin límites e infinita.

En la Iglesia Católica, el bautismo se da tanto a pequeños como a adultos conversos que no han sido bautizados válidamente antes (la Iglesia Católica considera válido el bautismo de la mayor parte de las iglesias cristianas puesto que se cree que el efecto proviene de manera directa de Dios, independientemente de la persona). , aunque no intencional, la fe del sacerdote).

Pero la Iglesia católica reitera que el bautismo de los niños pues “habiendo nacido con el pecado original, precisan ser librados del poder del Malvado y trasladados al reino de la independencia de los hijos de Dios”. De ahí que, la Iglesia sugiere a sus leales que hagan todo lo posible para eludir que un individuo no mencionada muera en su presencia sin la gracia del bautismo. De esta manera, si bien el sacramento deba ser administrado por un sacerdote, ante un enfermo no bautizado, cualquier persona puede y debe bautizarlo, diciendo “Yo te bautizo, en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo”, al tiempo que , con el pulgar de la mano derecha, dibuje una cruz en la frente, la boca y el pecho del tolerante.

Visto que el bautismo se administre en general a pequeños recién nacidos, que en consecuencia no están accediendo en la vida cristiana por sí solos, enseña que estas personas estén obligadas a recibir otro sacramento, la Confirmación, en el momento en que alcanzan la madurez, edad donde tienen suficiente discernimiento y capacidad intelectual para profesar responsablemente su fe y decidir si quieren o no mantenerse en la Iglesia Católica. Si es de esta forma, entonces están, en un caso así, ratificando la decisión que sus padres o tutores han tomado en su nombre el día de su bautismo. Sin embargo, como este sacramento imprime carácter, quien recibe el Bautismo, lo confirme o no mediante el sacramento de la Crismación o de la Confirmación, va a ser bautizado para siempre.

En la Iglesia Católica, el sacramento del bautismo tiene varios símbolos, pero hay cuatro principales, que son: agua, aceite, túnica blanca y vela. Cada uno representa un secreto en la vida del bautizado. Aparte de estos símbolos (que son los principales) el Rito De roma también establece la sal, pero este símbolo solo se utiliza según las orientaciones pastorales de las Iglesias particulares.

Veamos los significados de los símbolos:

– Agua: Representa el paso de la vida “pagana” a una “vida novedosa”. Tiene el aspecto de limpieza, lavándonos del pecado original.

– Aceite: Representa la fuerza del Espíritu Santurrón. En los viejos tiempos, los luchadores usaban el aceite antes de las peleas para endurecer los músculos y poder ganar. En la vida novedosa adquirida por el bautismo, tiene la misma función, vestir a los bautizados para las luchas diarias contra las asechanzas del maligno.

– Vestido blanco: Representa la vida novedosa conseguida por el bautismo. En el momento en que nos duchamos vestimos ropa limpia, el bautismo no sería diferente. Somos lavados en agua y envueltos de novedosa vida.

– Candela: Tiene 2 significados: el Espíritu Beato y el don de la fe. Por el bautismo somos envueltos de muchas gracias y la primordial es el Espíritu Santo, porque vamos a estar unidos a Dios como hijos para ser santificados y esta santificación se realiza por medio del Espíritu Santo. La fe es un don fundamental para nuestra vida, es por ella que reconocemos a Dios y por ella recibimos sus gracias.

Confirmación o Confirmación

sacramento de la confirmaciónsacramento de la confirmación

Confirmación del Bautismo o Confirmación La persona mencionada reafirma su fe en Cristo, siendo ungido a lo largo de la liturgia, recibiendo los siete dones del Espíritu Santo. La unción la hace el Obispo o sacerdote autorizado, con óleo bendito el jueves de la Semana Santa.

Es un sacramento instituido para dar la posibilidad a una persona -que fue bautizada por resolución ajena y que tiene ante la Iglesia compromisos asumidos por otra gente en su nombre frente a la pila bautismal- de corroborar el deseo de ser integrante de la familia cristiana en la Iglesia católica y ratificar esos compromisos, después de haber llegado a la “edad de la razón”.

Simplemente, la liturgia radica en la renovación de las “promesas bautismales”, por medio de cuestiones del Obispo, que generalmente la preside, en voz alta y de igual forma respondidas por el afirmado frente a la comunidad.

De la misma el Bautismo, la Confirmación asimismo imprime carácter y solo puede administrarse una vez a cada individuo.

Como se trata de un acto de afirmación de compromisos, la persona jamás podrá recibir la confirmación o, yendo a formar parte en la ceremonia, dejar de corroborar estos compromisos.

En cualquier caso, cualquier persona que no haya sido confirmada o que se haya negado a actualizar sus compromisos bautismales puede llevarlo a cabo en cualquier momento.

La crismación es, por tanto, un sacramento ligado, complementario del bautismo, puesto que carece de sentido si se administra a alguien que no ha sido bautizado.

eucaristía

Sacramento de la EucaristíaSacramento de la Eucaristía

Es la celebración en memoria de Cristo, recordando la Santa Cena, la Pasión y la Resurrección, donde el católico recibe la Hostia consagrada.

Es el sacramento culminante, que da a los leales la oportunidad de recibir e consumir físicamente lo que consideran el cuerpo de Jesucristo, en el que se ha convertido el pan consagrado por el sacerdote, como el vino se ha convertido en su sangre.

En el sacramento de la Eucaristía, la hostia consagrada (pan) se distribuye a los leales, quienes se la llevan a la boca y la ingieren lenta y respetuosamente.

Para recibir la hostia, los fieles deben estar en “estado de gracia”, o sea, deben haber confesado previamente sus errores y recibido el perdón divino a través del sacramento de la Confesión o Penitencia.

La consagración no es una parte del sacramento de la Eucaristía. Es un antecedente y un rito aparte. Es un acto que solo los sacerdotes tienen el poder de realizar.

La Iglesia Católica sostiene que en el momento en que el sacerdote pronuncia las expresiones rituales “Este es mi cuerpo” con relación al pan y “Esta es mi sangre” en relación al vino, se genera un fenómeno llamado transubstanciación, es decir, la sustancia material que constituye el el pan se transforma en el cuerpo de Cristo y lo que constituye el vino se transmuta en su sangre.

El pan transubstanciado se distribuye a los fieles que, al ingerir la hostia, están ingiriendo el cuerpo de Cristo. La Eucaristía se considera el sacramento de la acción de gracias, en el sentido de la palabra griega original εὐχαριστία (transc. “eukharistia”).

Reconciliación o Penitencia

sacramento de la reconciliaciónsacramento de la reconciliación

Es la confesión de los errores a un sacerdote, que aplica la penitencia para, una vez cumplida, efectuar la reconciliación con Cristo. En otras expresiones, es el sacramento que le da al católico católico la posibilidad de admitir sus faltas y, si se arrepiente de ellas, ser perdonado por Dios.

El reconocimiento de las faltas es su confesión a un sacerdote, que puede oírlas en nombre de Dios y entregar a aquel leal su perdón.

Desde un criterio formal, el confesor se arrodilla frente a un sacerdote, el confesor, y le afirma que ha pecado, que quiere confesar lo que hizo y pedirle a Dios que perdone sus pecados. tus pecados.

Después de escucharlo, corresponde al sacerdote sugerir sus palabras de consejo, censura, guía y consuelo al penitente, sugiriendo la penitencia a cumplir.

El confeso debe rezar la oración llamada Acto de Contrición, tras lo que el sacerdote pronuncia las expresiones de perdón y bendice al penitente, que se quita a cumplir la penitencia que le fué precripta.

La Iglesia Católica considera el sacramento de la penitencia como un acto purificador, que debe practicarse antes de la Eucaristía, para que se reciba con el alma limpia para el perdón de los errores. Pero, asimismo se comprende que este efecto purificador es saludable, siendo beneficioso para el espíritu cada vez que se ejerce.

Entre los deberes mucho más estrictos que la Iglesia impone al sacerdote es el secreto de confesión.

El sacerdote tiene terminante y totalmente contraindicado descubrir lo que escucha de los leales en el confesionario. El incumplimiento de este deber se considera entre los errores mucho más enormes y graves que puede cometer un sacerdote y lo somete a penas muy severas impuestas por la Iglesia.

unción de los enfermos

Sacramento de la Unción de los EnfermosSacramento de la Unción de los Enfermos

La Unción de los Enfermos es el sacramento por el que el sacerdote ora y unge a los enfermos para animarlos a sanar por la fe, escucha su arrepentimiento y fomenta el perdón de Dios. Este sacramento se puede dirigir a cualquier persona que se encuentre en estado de enfermedad, no solo a las personas que están en estado de agonía cualquier ocasión.

Orden

sacramento del ordensacramento del orden

El sacramento del Orden Sagrado entrega la autoridad para ejercer funciones y ministerios eclesiásticos que conciernen al culto de Dios y la salvación de las almas. Se distribuye en tres grados:

El Episcopado: Confiere la plenitud del orden y hace del candidato legítimo sucesor de los apóstoles y le encomienda los oficios de instruir, santificar y gobernar.

El Presbiterio: Configura al candidato a Cristo como sacerdote y buen pastor, capaz de actuar en nombre de Cristo Cabeza y de ministrar el culto divino.

El diaconado: Da al candidato la orden para el servicio en la Iglesia, mediante el culto divino, la predicación, la guía y, sobre todo, la caridad.

Casamiento

sacramento del matrimoniosacramento del matrimonio

El sacramento que, estableciendo y santificando la unión entre un hombre y una mujer, funda una nueva familia cristiana. El matrimonio es el casamiento entre un hombre y una mujer, festejado en la Iglesia y santificado en indisolubilidad y lealtad;

Es uno de los sacramentos que imprime carácter, si bien de una forma diferente del bautismo, la crismación y la ordenación. Estos tres últimos dejan una huella indeleble en los leales que los reciben, que los acompaña por toda la eternidad. Cualquiera que haya sido bautizado o afirmado, que haya sido ordenado sacerdote, va a tener esta condición independientemente de cualquier cosa, incluso si luego escoge transformarse a otro credo espiritual o dejar el sacerdocio.

El matrimonio imprime carácter a la pareja, al conjunto que los 2 cónyuges llegaron a conformar, y es, por tanto, doctrinalmente indisoluble. El carácter que imprime el matrimonio se disuelve con la desaparición de uno de los cónyuges. Es un sacramento que se consuma solo cuando hay dos participantes. La desaparición de uno disuelve la pareja, extinguiéndose el matrimonio.

Otra característica peculiar del sacramento del matrimonio es que no es administrado por el sacerdote, sino por la pareja que, haciendo el sacramento frente a la Iglesia, pide y recibe del sacerdote la bendición para la novedosa familia que está naciendo.

Esperamos que le gustara nuestro articulo Los 7 Sacramentos de la Iglesia Católica
y todo lo relaciona a Dios , al Santo , nuestra iglesia para el Cristiano y Catolico .
Cosas interesantes de saber el significado : Virgen Maria