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Llamado a redoblar los esfuerzos diplomáticos en Siria
Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN, por sus siglas en inglés) ha prometido 2,8 millones de dólares para ayudar a los cristianos de Siria, ya que la agencia de ayuda Concern advirtió que la situación dentro de Siria continúa deteriorándose a diario.
en una columna en El puesto comercial dominicalBrid Kennedy, director regional de Concern, informó que Siria ahora tiene la población desplazada más grande del mundo con 7,6 millones de personas que se han mudado desde áreas de conflicto dentro del país.
Otros 3,8 millones se han trasladado a países vecinos.
Eso es 11,4 millones de personas fuera de casa. Más de 220.000 personas han muerto durante el conflicto.
“No debemos mirar hacia atrás dentro de 20 años y preguntarnos por qué no hicimos más para ayudar”, escribió.
Pidió que se encuentre una solución política redoblando los esfuerzos diplomáticos.
Hasta que se encuentre esa solución, los refugiados y las personas desplazadas deben recibir alimentos, vivienda, agua y educación.
Sin embargo, el año pasado la comunidad internacional solo financió el 58% de las necesidades humanitarias. Más de 40 donantes hicieron promesas de ayuda, pero no todas se cumplieron.
Irlanda merece más crédito que otros ‘por cumplir en gran medida su promesa’, escribió.
Destacó lo injusto que es que los cinco países vecinos de Siria que acogen a los refugiados (Líbano, Turquía, Jordania, Irak y Egipto) y como consecuencia se estén quedando sin recursos.
Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN, por sus siglas en inglés) ha destacado la difícil situación de los cristianos en Siria y ha prometido $2,8 millones para ayudarlos.
La organización benéfica está proporcionando fondos a 4.500 familias vulnerables para comprar petróleo, gas, electricidad y alquilar durante cuatro meses en varias ciudades y en el campo.
Está proporcionando suministros médicos para las comunidades de Alepo y Hassake durante seis meses; pagando reparaciones y combustible en seis escuelas en Alepo y Damasco.
De acuerdo con su trabajo central en países donde los cristianos están bajo presión, ACN está apoyando a las iglesias locales en la reparación de infraestructuras gravemente dañadas o destruidas: iglesias, centros de catequesis y oficinas diocesanas, entre otros proyectos.
ACN declaró que los cristianos en Siria se han beneficiado solo de forma limitada de la ayuda proporcionada por la ONU y otras ONG grandes y seculares.
Esto se debe a que son reacios a registrarse en las agencias de ayuda (e identificarse como cristianos) por temor a los musulmanes extremistas que persiguen a los cristianos por su fe y su aparente apoyo al régimen sirio.
Los esfuerzos de socorro también se han reducido con los combates y el ascenso de ISIS.
El P. Andrzej Halemba, jefe de la sección de Medio Oriente de la organización, expresó las preocupaciones de los líderes locales de la Iglesia diciendo: “Los cristianos de Alepo temen que lo que sucedió en Mosul también les suceda a ellos. Este es un miedo nuevo y, lamentablemente, justificado a la limpieza religiosa”.
“El Estado Islámico muestra abiertamente sus intenciones asesinas contra cualquiera que no se doblegue a su tipo de extremismo”.
El padre Halemba dijo que la comunidad internacional, además de enfrentar la amenaza de ISIS, está a la deriva y descuidando la crisis siria. Advirtió que unos 5,6 millones de niños están directamente afectados por la guerra y 3 millones de estudiantes ya no pueden asistir a la escuela.
Otro líder de la iglesia en la región, el patriarca de Antioquía de los greco-melquitas, Su Beatitud Grégoire III, dijo a la Agencia Fides que rechaza la idea de que el sufrimiento infligido a los cristianos y otras comunidades por los yihadistas justifique la intervención militar de los organismos internacionales.
“Somos un país soberano con un gobierno legítimo, que es responsable de proteger a sus ciudadanos. Si uno realmente quiere poner fin a la tragedia del pueblo sirio, solo hay un camino: detener las guerras, las armas, el dinero y las estratagemas utilizadas para atacar a Siria”, dijo.
El 16 de marzo asistió a una vigilia por la paz en la Catedral de la Asunción de María en Damasco, a la que asistieron representantes y delegaciones de todas las comunidades católica y ortodoxa.
“Compartimos cantos y oraciones de penitencia y paz”, dijo el Patriarca, “mostrando a todos, también de esta manera, que los cristianos son los verdaderos promotores de la paz en Siria”.
Agregó que el camino para promover la paz que la Iglesia debe indicar constantemente “a todos los hombres de buena voluntad” es el de la oración y el apoyo ofrecido a todos los que puedan ayudar a detener el flujo de armas que causan derramamiento de sangre en Medio Oriente.
