Hogar > Noticias > Llamado a avergonzar a los perpetradores de violencia para proteger a la sociedad irlandesa
Llamado a avergonzar a los perpetradores de violencia para proteger a la sociedad irlandesa
La administración de justicia es un servicio que unifica a la sociedad además de ser un pilar fundamental de la democracia, ha dicho el arzobispo Diarmuid Martin.
En declaraciones a los representantes de la abogacía y de los que administran justicia, el Arzobispo calificó su contribución a la sociedad como fundamentalmente ligada a la calidad de la convivencia como ciudadanos.
Dijo el lunes que los administradores de justicia pueden tener que dedicar gran parte de su tiempo a abordar y tratar la injusticia y tratar de apaciguar las divisiones y los litigios.
Pero recordó a sus oyentes que su tarea fundamental era asegurar un marco funcional y funcional para el bien común, en el que cada individuo pudiera florecer.
En su homilía en una misa con motivo del inicio de la nueva legislatura en la iglesia de St Michan en Dublín, también advirtió que los delincuentes que intentan imponer su gobierno a través de la violencia son una amenaza para la democracia y pidió una “respuesta coordinada” por parte de el estado para detener la propagación de la “violencia sin sentido”.
El arzobispo pidió avergonzar a los perpetradores de violencia para proteger a la sociedad irlandesa y rindió homenaje al papel de Gardaí en la lucha contra el crimen y la violencia.
“Nuestra nación tiene una deuda de gratitud con los hombres y mujeres de An Garda Síochána que diariamente enfrentan los riesgos de estar en primera línea contra un mundo cada vez más sofisticado y sin escrúpulos de delincuencia y corrupción”, dijo.
Fue muy crítico con la proporción de hombres y mujeres con problemas de salud mental que terminan en el sistema penitenciario incapaces e incapaces de abordar sus problemas. Dijo que esto requería “una respuesta política y social urgente”.
Al dirigirse a los representantes del Tribunal Supremo, el Tribunal Superior y el Tribunal de Distrito, y el cuerpo diplomático que asistieron a la misa, así como a los representantes del poder judicial de Irlanda del Norte, Escocia y Gales, el Dr. Martin admitió que no se podía esperar que los tribunales ofrecieran soluciones a la muchos desafíos sociales que a veces encuentran su expresión más dramática en la sala del tribunal.
Pero destacó que la correcta administración de justicia fomenta la unidad y la armonía en la sociedad y tiene por objeto establecer un marco para el bien común en el que cada individuo pueda florecer.
Cuando la administración de justicia funciona bien, contribuye a la construcción de una sociedad sana y cuando la disfuncionalidad entra en el sistema trae “efectos degenerativos en el tejido mismo de la sociedad”, comentó el Arzobispo.
La disfuncionalidad en la administración de justicia es generalmente un síntoma de un malestar más profundo dentro de una sociedad, advirtió.
También señaló que la independencia del sistema judicial es la primera institución que se ve socavada por sistemas totalitarios o corruptos e instó al poder judicial a garantizar que la reivindicación de los derechos no se convierta en coto exclusivo de quienes tienen medios económicos para emprender acciones legales.