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La pobreza infantil y la falta de vivienda peor que nunca
Tres organizaciones benéficas han destacado que la pobreza infantil y la falta de vivienda es peor que nunca en Irlanda.
El SVP dijo que sus visitas semanales indican que hay una falta de progreso en la reducción de la pobreza infantil.
La pobreza constante saltó del 9,9 % en 2012 al 11,7 % en 2013.
Esto significa que los niños se quedan sin las necesidades básicas del día a día, como calefacción en el hogar, ropa nueva y dos pares de zapatos resistentes.
“Este nivel de aumento de la pobreza infantil coincide con el aumento en el nivel de solicitudes de asistencia recibidas por SVP en el mismo período. Como resultado, el SVP ha proporcionado aproximadamente 40 millones de euros por año en asistencia directa a las familias durante los últimos cinco años, el doble de la cifra en los años previos a la austeridad”, dijo John-Mark McCafferty, SVP Head of Social Justice and Policy.
Agregó que puede haber habido avances en la mejora del bienestar financiero y económico dentro de algunos sectores del país, pero ha sido a expensas de las personas de bajos ingresos o dependientes de los pagos estatales que se han reducido significativamente.
La Alianza por los Derechos del Niño Boleta de Calificaciones 2015 publicado el lunes califica el desempeño del Gobierno en temas que afectan a la niñez frente a los compromisos establecidos en el Programa de Gobierno 2011-2016.
El Gobierno recibe una calificación general de ‘C’ que refleja un intento satisfactorio, pero con posibilidades de mejora significativa.
La calificación se ha mantenido igual desde 2013, luego de un pico de calificación ‘C+’ en 2012.
En el aspecto de la pobreza infantil del Report Card, el Gobierno obtiene una calificación F, una caída desde la calificación E del año pasado.
“La cantidad de niños que experimentan una pobreza constante se ha duplicado desde el comienzo de la recesión en 2008. Solo podemos concluir que los niños fueron, y siguen siendo, las verdaderas víctimas de la recesión”, dijo Tanya Ward, directora ejecutiva de Children’s Rights. Alianza.
Explicó que en 2014 las familias continuaron luchando con el aumento de los precios de alquiler, las facturas de servicios públicos, las deudas personales, la falta de vivienda y la pobreza alimentaria.
“Aunque el Gobierno introdujo un pequeño aumento mensual en el pago del Child Benefit por primera vez en siete años, esto no fue suficiente”, dijo.
La Alianza por los Derechos del Niño pide al Gobierno que publique un ambicioso plan de implementación basado en los derechos para alcanzar la Meta de Pobreza Infantil y que cada departamento lleve a cabo una evaluación de impacto social antes de las decisiones presupuestarias, asegurando que el Presupuesto 2016 esté a prueba de pobreza y respete los derechos de los niños. derechos.
También esta semana, en un documento informativo, Barnardos advirtió que la realidad de estar sin hogar o vivir en un alojamiento inadecuado está afectando a demasiados niños.
Las últimas cifras del Departamento de Medio Ambiente revelaron que 865 niños viven en albergues, pensiones y hoteles, afirmó la organización benéfica.
“El alojamiento inestable e inapropiado puede tener un impacto devastador en los niños, no solo los desafíos físicos, incluida la falta de privacidad, la falta de un lugar para jugar o hacer la tarea, sino que inevitablemente el estrés que un padre está soportando se contagiará a sus hijos, causando indecibles problemas emocionales. angustia. El impacto dual puede ser profundo y duradero. Se debe hacer todo lo posible para garantizar que un niño no pase por esto”, dijo June Tinsley, directora de defensa de Barnardos.
Destacó experiencias del día a día, como la de un padre con tres hijos y su arrendador vendiendo la propiedad, por lo que en lugar de terminar en un alojamiento de emergencia, se conformó con un piso de dos dormitorios en un complejo con problemas de humedad y alcantarillado.
Otros padres no han podido garantizar el acceso a las visitas con sus hijos debido a que se encuentran en un alojamiento de emergencia. Otros incluso han tenido que dejar a sus hijos a cargo porque no pueden encontrar un alojamiento adecuado.
“Sabemos de un niño que no pudo ingresar en una lista de espera para una operación porque vivía en un alojamiento de emergencia y, por lo tanto, técnicamente no tenía un domicilio fijo”, dijo June Tinsley. “La crisis de la vivienda sigue siendo muy real para demasiados niños”.
Dijo que si bien el Gobierno está tomando medidas para abordar la falta de vivienda social, su respuesta a los problemas del sector privado de alquiler es insuficiente.
Los niveles de suplementos de alquiler son demasiado bajos, al igual que los límites de los pagos de asistencia para la vivienda y también hay una reducción continua en la disponibilidad del Plan de alojamiento de alquiler.
La acción propuesta contra los propietarios que rechazan el subsidio de alquiler es positiva, pero se necesitan controles de alquiler realistas y alojamiento de emergencia localizado y familiar.
