La bendición del peregrino sigue adelante en St James’s, Dublín, a pesar de la suspensión de las actividades del Camino

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La bendición del peregrino sigue adelante en St James’s, Dublín, a pesar de la suspensión de las actividades del Camino

A pesar de las restricciones de circulación y desplazamientos a causa de la epidemia de COVID-19, se puso en marcha la temporada del Camino

Dos mochilas con conchas de vieiras, símbolos del Camino de Santiago.

ayer con la bendición de los peregrinos en la iglesia de St James en el centro de la ciudad de Dublín.

“Esto pasará, volveremos a peregrinar cuando esto termine”, dijo el párroco, el padre Eugene Taafe, en una transmisión de bendición en Internet a través de Church Services TV.

Normalmente, durante la temporada del Camino, las bendiciones de los peregrinos se realizan en Santiago el último sábado del mes y la primera bendición de la temporada es una gran ocasión, con muchos ex peregrinos y voluntarios que asisten al evento. Habitualmente, tras la bendición, a los que están a punto de partir hacia España se les entregan conchas de vieiras, símbolos de la peregrinación, para que las lleven durante el viaje.

Pero este año, a causa del COVID-19, la peregrinación ha sido suspendida por las autoridades eclesiásticas españolas y, del mismo modo, el padre Taaffe desaconsejó a los peregrinos irlandeses asistir personalmente a la ceremonia de ayer.

“Las puertas de la iglesia estaban y están abiertas”, dijo. “Aparecieron algunas personas, lugareños, pero la mayoría de las personas fueron sensatas y se mantuvieron alejadas; en cambio, sintonizaron para ver la bendición a través de Internet”.

Durante siglos esta parroquia ha estado vinculada a la Romería a la Catedral de Santiago de Compostela, donde se guardan y veneran los restos del Apóstol Santiago. De hecho, la fábrica de Guinness contigua a la iglesia, St James’s Gate Brewery, toma su nombre del hecho de que desde la época medieval los peregrinos partían hacia el norte de España desde este lugar de Dublín.

En los últimos años, la iglesia parroquial ha sido sede de las oficinas de la Sociedad del Camino de Irlanda, antes conocida como la Confraternidad de St James, y es aquí donde los peregrinos recogen su Credencial del Peregrino, o pasaporte de peregrino, que debe ser sellado. para demostrar que han caminado más de 100 km del viaje a Santiago.

“Quienes están involucrados en el camino están muy entusiasmados y comprometidos”, dijo el padre Taaffe. “Es como un insecto con ellos. De hecho, creo que tengo el virus de la peregrinación de ellos. No he estado en el camino, pero está en mi lista de deseos para hacerlo.”

El párroco de St. James dice que cree que hay muchas personas que están atrapadas en sus casas y se comprometen a hacer la peregrinación una vez que termine la crisis de la pandemia. Él dijo: “Cuando todo esto termine, habrá mucha gente que querrá hacer peregrinaciones de acción de gracias”.