Instan a fieles a celebrar el Día de San Patricio con misa

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Instan a fieles a celebrar el Día de San Patricio con misa

Misa por el Día de San Patricio con el presidente Michael D. Higgins y la Sra. Sabina Higgins en la Pro Cathedral de Dublín.

Misa por el Día de San Patricio con el presidente Michael D. Higgins y la Sra. Sabina Higgins en la Pro Cathedral de Dublín.

Los obispos del país han instado a la gente a no olvidar que el Día de San Patricio es un día de precepto y que los fieles deben asistir a Misa.

En un comunicado emitido el miércoles, luego de su reunión general de primavera en Maynooth, la jerarquía dijo que la mejor manera de celebrar el Día de San Patricio es yendo a Misa.

Recordaron a los católicos que están obligados a honrar a su santo patrón de esta manera.

La jerarquía también recordó a los fieles que las celebraciones se estaban llevando a cabo en el contexto de la recesión económica en curso y que la recesión había resultado en “desamor doméstico en toda Irlanda para muchas personas y familias debido a la presión del desempleo y la emigración”.

Se comprometieron a orar por intercesión del Santo el próximo lunes por la fe y el bienestar del pueblo de Irlanda.

Alentando a las personas a pensar en los inmigrantes y las dificultades que enfrentan, los obispos recordaron a las personas que San Patricio fue un migrante del siglo V que tuvo que lidiar con muchos de los mismos desafíos con los que luchan los irlandeses cuando viven e integran nuevas culturas.

Los obispos animaron a la gente a orar por los migrantes en el país y en el extranjero que enfrentan dificultades derivadas del desplazamiento y la pobreza.

También se pidieron oraciones por la paz en Ucrania, especialmente por los que allí han sufrido en las últimas semanas, y que haya una solución justa a la disputa.

Hicieron un llamado al Gobierno para que aumente su compromiso de reasentamiento de las víctimas del conflicto sirio a por lo menos 300.

Reconociendo la escala de la crisis actual en Siria y la situación desesperada de los refugiados sirios, la Conferencia Episcopal dijo que el Gobierno necesitaba aumentar sus compromisos de reasentamiento con las víctimas de esta guerra.

Si bien el Gobierno ha informado a la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados que aceptará a 90 refugiados sirios este año, los obispos pidieron que esta cifra se incremente a por lo menos 300 y que se priorice el bienestar y la protección de los niños en cualquier programa de reasentamiento.

En su reunión de tres días en Maynooth, los obispos discutieron un informe de la reciente conferencia ‘Journeying Together: Challenges Facing the Migrant Today’ que fue organizado conjuntamente por el Consejo Episcopal para Emigrantes y el Consejo Episcopal para Inmigrantes en la ciudad de Dublín el 19 de febrero pasado.

Al observar la situación en Siria, dijeron que la vida diaria de los niños allí “es traicionera”.

El reclutamiento para el combate, la detención con adultos y su uso como escudos humanos son solo algunas de las atrocidades contra los niños en Siria denunciadas por Naciones Unidas.

“Por su propia naturaleza, los niños constituyen algunos de los refugiados sirios más vulnerables que Irlanda y otros países de Europa se han comprometido a reasentar en respuesta a un llamamiento del ACNUR para reubicar a 30.000 de los refugiados en mayor riesgo”, declararon los obispos. .

Los niños y las familias sirios no están solos en la búsqueda de seguridad y refugio en Irlanda. Sin embargo, muchas veces la esperanza ha sido escasa para muchos solicitantes de asilo que ya se encuentran en Irlanda.

Advirtieron que “Más de uno de cada tres vecinos en provisión directa lleva más de cinco años esperando una determinación definitiva de su pretensión con la vida en suspenso. Un tercio de todos los solicitantes de asilo son niños”.

Existen restricciones prácticas cotidianas en la vida familiar de los niños en provisión directa, señalaron y explicaron que los niños en provisión directa a menudo crecen sin haber visto a sus padres preparar una comida familiar.

“Vivir por períodos prolongados en este ambiente institucionalizado no es apropiado para los niños y puede inhibir su crecimiento y desarrollo saludables”, advirtió la conferencia de obispos.