Francisco a los nuncios: Defiende la Iglesia y no te unas
El Papa, en un alegato pronunciado a los Representantes Pontificios, compartió un “decálogo” de sugerencias (Vatican Media)
El Pontífice se reunió con los Nuncios en el Vaticano y, en un alegato escrito para la ocasión, compartió sencillos preceptos para la misión pontificia. En el Decálogo, dirigido también a los obispos y curas de todo el planeta, se destaca la importancia del Representante Pontificio como hombre de Dios, de Iglesia, de celo apostólico y de reconciliación, del Papa, de iniciativa, de obediencia, de oración, caridad y humildad.
Andressa Collet – Ciudad del Vaticano
Este jueves por la mañana (13) y por tercera vez en el Vaticano, el Papa Francisco recibió en audiencia a más de 100 Representantes Pontificios, incluidos 98 Nuncios Apostólicos. El encuentro forma parte de un acercamiento, convocado por exactamente el mismo Pontífice, que concluye el sábado (15) y también incluye instantes de espiritualidad y sesiones de trabajo sobre la actualidad eclesial, la colaboración en todo el mundo y el diálogo interreligioso.
El Papa pronunció unas expresiones en privado y pronunció el alegato redactado para la ocasión, que comenzó con una invitación: analizar la vida de la Iglesia con “ojos de pastor” y pensar sobre la “frágil y también importante misión” de los Representantes Pontificios . Para esto, Francisco compartió ciertos preceptos “fáciles y elementales” por medio de un “decálogo”, asimismo dirigido a los ayudantes, para realizar el servicio con “exactamente el mismo entusiasmo que en el primer orden”. En las orientaciones, escribió el Papa, dirigidas también a obispos y sacerdotes de todo el mundo, la relevancia del Representante Pontificio como hombre de Dios, de Iglesia, de celo apostólico y de reconciliación, del hombre del Papa, de iniciativa, de obediencia, de oración, de caridad y de humildad.
1 – El Nuncio es un hombre de Dios
Francisco describió al “hombre de Dios” como aquel que sigue a “Dios en todo y para todo”, viviendo “para las cosas de Dios y no para las de todo el mundo”. Para no “desviarse y dañar a la Iglesia”, el Nuncio necesita entender caminar con humildad, practicar la justicia y mantener el corazón abierto a los menos favorecidos de la sociedad.
“El hombre de Dios no engaña ni engaña a su prójimo; no cede a los chimentos y comentarios; Mantén tu mente y tu corazón puros, guardando tus ojos y oídos de la inmundicia de todo el mundo. No se deja engañar por los valores mundanos, sino mira a la Palabra de Dios para juzgar lo que es propio y bueno. El hombre de Dios busca seriamente ser ‘santurrón y sin mácula enfrente de él’ (Efesios 1:4). ”
2 – El Nuncio es un hombre de Iglesia
El Papa recordó que el Nuncio representa al Sustituto de Pedro y “la cara, las enseñanzas y las posiciones de la Iglesia”. En este sentido, Francisco mencionó a la tentación del mal servidor en el momento en que charló de los Nuncios que “tratan mal a sus ayudantes” y tienen otras posturas:
“Es feo ver a un Nuncio en pos de lujos, ropa y elementos de ‘marca’ entre gente que no posee lo que precisa. Es un contra-testimonio. El mayor honor para un hombre de Iglesia es el de ser ‘servidor de todos’. […] Ser hombre de Iglesia significa defender valientemente a la Iglesia contra las fuerzas del mal que siempre y en todo momento tratan de desacreditarla, difamarla o calumniarla. ”
3 – El Nuncio es un hombre de celo apostólico
Francisco dijo que el celo apostólico es esa fuerza que “nos resguarda del cáncer de la desilusión” y de la tentación de caer en “la timidez y la indiferencia de los cálculos políticos y diplomáticos, o incluso en la ‘corrección política'”. El Pontífice citó entonces la “enorme figura de san Maximiliano María Kolbe”, cuando escribió sobre la propagación del “indiferentismo”, según el Papa, “una enfermedad prácticamente epidémica que se propaga de distintas formas, no solo en la generalidad de los leales, sino asimismo entre los miembros de institutos religiosos”.
4 – El Nuncio es un hombre de reconciliación
Es esencial que el Nuncio, siendo un hombre de comunicación, sea también de “mediación, comunión, diálogo y reconciliación”, añadió Francisco, siempre y en todo momento intentando encontrar ser “imparcial y propósito”.
“Si un Nuncio se encerrara en la Nunciatura y evitara encontrarse con la multitud, traicionaría su misión y, en vez de ser aspecto de comunión y reconciliación, se convertiría en obstáculo y también impedimento. No debéis olvidar nunca que representáis el rostro de la catolicidad y de la universalidad de la Iglesia en las iglesias locales de todo el planeta y en los gobiernos”.
5 – El Nuncio es el hombre del Papa
Francisco recordó que el Nuncio no se representa a sí mismo, sino más bien al Sucesor de Pedro y de esta forma “concreta, actúa y representa la presencia del Papa entre los fieles y las ciudades. Es precioso que en diferentes países –dijo el Pontífice– la Nunciatura se llame ‘la Casa del Papa’”.
Un óptimo Nuncio necesita llevar una vida de nómada, o sea, “vivir siempre con la maleta lista” para ser enviado por el Papa y la Iglesia, incluso en las comunidades donde el Pontífice no puede llegar. Y Francisco resaltó:
“Ser Representante Pontificio es, por tanto, incompatible con criticar al Papa por la espalda, tener weblogs o incluso sumarse a conjuntos hostiles a él, a la Curia ya la Iglesia de Roma. ”
6 – El Nuncio es un hombre de iniciativa
El hombre de idea es un individuo que sigue las capacidades de Jesús y el modelo de los Apóstoles, “es un maestro que sabe enseñar a el resto a acercarse a la verdad” para no dejarse sorprender por las tormentas de la vida.
Además, dijo el Papa, el Nuncio debe “adoptar una conducta correcta a las demandas del momento, sin caer jamás en la rigidez mental, espiritual y humana, ni en la elasticidad hipócrita y camaleónica. No tiene que ver con ser oportunistas, sino más bien de saber pasar del concepto a la implementación, sabiendo el bien común y la lealtad al orden”.
7 – El Nuncio es un hombre de obediencia
“La virtud de la obediencia es inseparable de la independencia”, ha dicho Francisco, y “la obediencia a Dios no puede separarse de la obediencia a la Iglesia y a los superiores”. El Nuncio debe proseguir el modo de vida de Jesús de Nazaret y, parafraseando tanto a San Maximiliano María Kolbe como a San Agustín, el Papa advirtió:
“Un Nuncio que no vive la virtud de la obediencia, aun en el momento en que sea bien difícil y contraria a su visión personal, es como un viajero que pierde la brújula, arriesgándose de este modo a fracasar en su propósito. Debemos recordar siempre el dicho ‘Medice, cura te ipsum’. Es contratestimonio llamar a otros a la obediencia y a la desobediencia”.
12/06/2019
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8 – El Nuncio es un hombre de oración
La relación con el Señor, la familiaridad con Jesucristo, debe ser el alimento diario de un Representante Pontificio, recordó el Pontífice:
“La primera tarea de todo obispo, entonces, es ocuparse a la oración y al ministerio de la palabra. […] Sin oración nos transformamos en sencillos usados, siempre infelices y frustrados. La vida de oración es esa luz que ilumina todo lo demás y todo el trabajo del Nuncio y su misión”.
9 – El Nuncio es un hombre de caridad activa
El Papa Francisco elogió la relevancia del acercamiento con Jesús mediante la necesidad de “tocar con nuestras manos la carne de Cristo”, los pobres, los mucho más enclenques, toda la familia humana. No basta ponerse un límite a las ocupaciones prácticas propias del Representante Pontificio, sino hacer retribuir la misión con obras de caridad para ser verdaderamente padre y pastor.
El Pontífice, al charlar de la caridad como gratuidad, también se refirió al “persistente peligro de las prebendas”:
“La caridad activa debe llevarnos a ser reservados al admitir los regalos que se proponen para oscurecer nuestra objetividad y, en ciertos casos, lamentablemente obtener nuestra libertad. ¡Ningún obsequio de ningún valor debería esclavizarnos! Rechace obsequios muy costosos y, de manera frecuente, inútiles, o envíelos a organizaciones beneficiosas. Y ten en cuenta que recibir un regalo caro jamás justifica usarlo. ”
10 – El Nuncio es un hombre de humildad
El Papa concluye el discurso dirigido a los Representantes Pontificios, abordando el precepto del Nuncio como hombre de humildad, volviendo a ofrecer la oración redactada por un Siervo de Dios y ex- Secretario de Estado, el Card. Rafael Merry del Val (1865-1930), que, en síntesis, señala el camino cristiano de humildad y amor.
Esperamos que le gustara nuestro articulo Francisco a los nuncios: Defiende la Iglesia y no te unas
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