Fiel multitud el Campinho en el tercer día de

Erika Augusto

Vila Vieja (ES) – El martes amaneció con un cielo nuboso, muy distinta a los últimos días, que fueron calurosos y soleados.

El tiempo ayudó a los devotos de Nossa Senhora da Penha, que acudieron en gran número para celebrar el tercer día del Oitavário.

La Celebración Eucarística fue preparada por el Área Pastoral Cariacica-Viana.

Se repartieron pañuelos colorados a todos, lo que asistió a colorear aún mucho más el Campo Pequeño, que se encontraba lleno de leales.

La Misa fue presidida por el P.

Carlos Antonio Conceição, de la Parroquia de Bom Jesus de Novo Horizonte, Cariacica.

Concelebraron los sacerdotes y diáconos del Área Pastoral, al lado del Ministro provincial, fr.

Fidêncio Vanboemmel, el Definidor provincial, fr.

Gustavo Medella, los frailes del Convento de Penha, Cariacica y los monjes llegados hoy de São Paulo, fr.

Diego Melo y fr.

Gabriel Dellandrea, del Servicio de Animación Vocacional (SAV) y viejo conocido de las capixabas, fr.

Valdecir Schwambach, ex- Rector y Guardián del Convento de Penha.

El predicador elegido para este tercer día de la Octava fue el P.

José Geraldo de Souza, de la Parroquia Sagrada Família, en el barrio Nova Rosa da Penha.

El Redentorista comenzó su homilía diciendo que era una alegría estar en el Convento de Penha, que es un símbolo del que el pueblo de Espírito Beato y los brasileiros están muy orgullosos.

“Todo cuanto tiene de bueno, desde su comida hasta las maneras de las expresiones religiosas, es una riqueza para nosotros, mineros, capixabas, baianos, brasileiros por norma general, para lograr mirar este estado y darnos cuenta que aquí Nuestra Señora y Santa Espíritu caminar juntos, a fin de que la multitud encuentre a Jesús”, ha dicho el sacerdote.

Una vez más, la figura de la mujer fue exaltada en el Octavário.

Según la religiosa, la mujer tiene un papel definitivo en la crónica de la Salvación, recordando a Moisés, que fue protegido por 2 mujeres y escapó de las manos del faraón, que había decretado la desaparición de los pequeños hebreos y recordando también a las mujeres que van al sepulcro tras la muerte de Jesús, los primeros destinatarios del mensaje de la Resurrección.

La importancia de la vida social también fue un tema destacado en la predicación de este tercer día de la Octava.

“Es en comunidad que discernimos esta experiencia de Cristo, que nos debe llevar, llevarnos de la pereza a la alegría.

Es en esta experiencia de comunidad que aprendemos a decir que todos somos hermanos, que no somos mucho más enormes que absolutamente nadie”, destacó el predicador, afirmando que es en la comunidad donde se purifica la fe cristiana.

Para finalizar, recordó tres expresiones del Papa Francisco en la Exhortación Evangelii Gaudium: verdad, misericordia y alegría, afirmando que los cristianos no tienen la posibilidad de estimar tener una verdad mayor que la realidad de Cristo.

Asimismo advirtió que la Iglesia ha de ser misericordiosa y que las comunidades precisan que la multitud arroje agua bendita al fuego, no gasolina, para de esta forma eludir enfrentamientos.

El pie.

José Geraldo también dijo que los cristianos necesitan ser presentes de su alegría en el mundo y no vivir encadenados por el temor, sino ser defensores de una sociedad justa, igualitaria, que no tolera la violencia.

En el final, se arrodilló frente a la imagen de Nossa Senhora da Penha, pidiendo por todos los que padecen y por todo el estado de Espírito Santurrón.

TESTIMONIOS

En el momento de la acción de gracias, seis mujeres fueron a dar su testimonio de los milagros recibidos por intercesión de Nossa Senhora da Penha.

En el final de cada alegato, dejaban rosas al pie de la imagen, colocada en el presbiterio.

Esta noche va a haber celebración y bendición de parejas, desde las 20 h, en Campinho.

El Oitavário continúa a lo largo de los próximos días, siempre a las 14:30 horas.

Mañana, día 19, la celebración incorporará con la participación del clero y las comunidades del Área Pastoral de Benevente.

TIEMPO DEVOCIONAL

Como es frecuente, antes de la celebración eucarística hay un momento de devoción a fray Pedro Palácios.

La oración de hoy fue apuntada por fr.

Fidêncio Vanboemmel y fr.

Gilson Kammer, coordinador fraterno de la Fraternidad de Colatina (ES) y párroco de la parroquia de Santa Clara de Assis, con ocasión del 300 aniversario de la aparición de Nuestra Señora en las aguas.

del río Paraíba do Sul.

Entonces, entraron dos jóvenes con la imagen de Nossa Senhora Aparecida, mientras que el equipo de música, encabezado por fray Paulo César y fray Florival Mariano de Toledo, cantaba en honor a la Santa Madre de Dios.

En su reflexión, fray Gilson destacó la importancia de la existencia de los franciscanos en el Convento de Penha. “Estamos llamados a hacer exactamente el mismo anuncio que logró fray Pedro Palácios, hace muchos años, al hacer de esta montaña, de este lugar sagrado, un lugar de encuentro con Dios para todo el pueblo de Espírito Santurrón y de todo el pueblo brasileño”, ha dicho el fraile.

Mencionó que es misión de todos, franciscanos y pueblo de Dios, comunicar con alegría la resurrección de Cristo, como se hace en estos días de celebración. “Cristo Resucitado prosigue ardiendo en nuestros corazones”, ha dicho, refiriéndose a los Discípulos de Emaús.

DEVOTOS DE NUESTRA SEÑORA DE LA PENHA

La programación del Oitavário sólo empieza por la tarde, a partir de las 14:30 horas, pero varios devotos llegan muy temprano al Campinho.

Este es la situacion de doña María Aparecida.

Ella fue la primera en llegar, a las 8:30 am.

Ella afirma que viene a la Festa da Penha todos los años.

“Esta fiesta es una bendición, pero pasa demasiado rápido”.

Ella asegura que consiguió muchas gracias por la intercesión de Nossa Senhora da Penha.

“Mi hijo era pequeño y estaba muy enfermo, los médicos se habían dado por vencidos.

Desde casa se podía ver el Convento.

Lo levanté en mis brazos y le solicité a Dios que si fuera mío, que lo bendijera.

Y subsistió, el día de hoy tiene 36 años”, afirma.