El impacto de Trócaire en Kenia elogiado por los delegados irlandeses

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El impacto de Trócaire en Kenia elogiado por los delegados irlandeses

Trocaire en KeniaUna delegación de las diócesis de Tuam y Galway regresó de su viaje misionero anual de la iglesia con Trócaire, que este año los llevó al barrio pobre de Nakuru en Kenia, donde el VIH y la violencia de género están aumentando.

Kenia será el foco de la campaña de Cuaresma 2016 de Trócaire y los nueve delegados vieron dónde ha estado trabajando la agencia católica de ayuda para mejorar la vida local.

El viaje misionero fue dirigido por el director de país de Trócaire para Kenia, Paul Healy, quien ha estado trabajando en las áreas más afectadas por la pobreza del país del este de África durante casi una década.

Entre los delegados que participaron en la visita estuvieron el P. Tom Brady y Maura Garrihy por parte de la Diócesis de Galway, Kilmacduagh y Kilfenora y Siobhán Bradley por la Arquidiócesis de Tuam.

Hablando sobre su visita, Maura Garrihy comentó: “La pobreza es algo real en Kenia. Tiene un olor real y tiene una cara real. Existe en una escala muy grande”.

“Para muchos parece que no hay zapatos, no hay acceso a apoyo, corrupción en sus líderes e instituciones, no hay apoyo médico, VIH, condiciones de vida que ni siquiera podemos imaginar en el mundo ‘desarrollado’, sexo comercial solo para ‘supervivencia’, sequía, sin medios de cultivo o vegetación, agua sucia, sin acceso a la educación, y mucho, mucho más”.

Algunos proyectos y temas destacados incluyeron los problemas enfrentados en el barrio pobre de Kangemi en el centro de Nairobi y un barrio marginal más rural en Nakuru.

Trócaire, a través de su trabajo con socios locales, ha puesto en marcha programas para abordar algunos de los problemas.

Un “programa muy efectivo” que visitaron los delegados es el Centro Amor y Esperanza en Nakura, dirigido por la Hna. Patricia Speight de Belfast y su equipo. Allí escucharon las historias de los jóvenes que se benefician de este servicio que salva vidas.

“Gracias Trócaire por no olvidarte de mí”, fueron las palabras de una joven madre de dos hijos postrada en cama.

También visitaron a la familia elegida como foco de la campaña de Cuaresma del próximo año, en Tharaka Nithi, un pueblo rural a tres horas de Nairobi.

Allí conocieron a Teresina, una joven madre de seis hijos cuyo esposo tuvo que salir de casa para buscar trabajo debido a las graves consecuencias del cambio climático.

Su historia se hace eco de la vida de tantos en este pueblo rural, ya que hasta el 80% de las familias de esta región no tienen suficiente comida.

Siobhán Bradley recordó: “Aquí vimos la cruda y fría realidad de la pobreza en su punto más alto cuando nos reunimos con niños que vivían en chozas del tamaño de nuestros baños, que no tenían zapatos, ropa para cambiarse y un niño que incluso usaba una t de Facebook. -camisa sin saber qué es este sitio web de redes sociales multimillonario. La brecha entre su mundo y el nuestro ciertamente se destacó una vez más”.

“Trócaire no podría llevar a cabo este trabajo invaluable para apoyar y empoderar a estas personas sin la generosidad del pueblo irlandés. A medida que nos acercamos a este Año de la Misericordia (Trócar en irlandés), dediquémonos cada vez más a #‎jointhefightforjustice”, instó Siobhán Bradley.

Para obtener más información sobre el trabajo de Trócaire, consulte www.trocaire.org