El aniversario del Informe Murphy es un recordatorio del “capítulo oscuro y lleno de dolor”

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El aniversario del Informe Murphy es un recordatorio del “capítulo oscuro y lleno de dolor”

Arzobispo Diarmuid Martin (Foto: John McElroy)

En un mensaje para el Día de la Salvaguardia Diocesana, el arzobispo Diarmuid Martin de Dublín dijo que el décimo aniversario de la publicación del Informe Murphy es un recordatorio “de ese capítulo oscuro y lleno de dolor” en la historia de la Iglesia.

En su mensaje a los feligreses de la diócesis de Dublín, el arzobispo Martin subrayó que para muchos de los que fueron abusados ​​de niños en la Iglesia y sus seres queridos, ese dolor es una realidad constante, “que perdurará por el resto de sus vidas”.

“No podemos deshacer el pasado. Sin embargo, podemos honrar el coraje de aquellos que han hablado de sus experiencias de abuso haciendo todo lo que esté a nuestro alcance para garantizar una Iglesia mejor y más segura para los niños de hoy y de mañana”, dijo el arzobispo Martin.

Refiriéndose a la reciente carta apostólica del Papa Francisco, Vos Estis Lux Mundiseñaló que este documento enseña que los fieles tienen la misma responsabilidad por el bienestar y la protección de los adultos vulnerables.

Al describir la salvaguardia como “vital”, el Arzobispo en su mensaje agradeció a todos aquellos que trabajan para hacer de la Iglesia en Dublín un lugar más seguro para los niños y adultos vulnerables.

También destacó que desde la publicación del Informe Murphy en 2009 ha habido una disminución en el número de denuncias de abuso infantil que llegan a la atención del Servicio Diocesano de Salvaguardia y Protección Infantil.

Sin embargo, el arzobispo Martin subrayó que la disminución no significa que tales acusaciones hayan cesado, solo que hay menos.

“No hay motivos para la complacencia. Es importante que sigamos comprometidos con este trabajo vital”.

Al pedir a los fieles que recuerden a quienes sufrieron abusos y oren por ellos, el Dr. Martin también reconoció el trabajo de protección que se ha realizado en las parroquias de Dublín para hacer de la Iglesia un lugar más seguro para los niños y adultos vulnerables.

“Nuestro clero parroquial, que ya estaba bajo presión debido a la disminución del número, ha tenido que aceptar responsabilidades adicionales en esta área, como garantizar que los involucrados en el ministerio público sean investigados.

“Quiero agradecer también a los cientos de representantes parroquiales de protección y a los miles que han asistido a la capacitación en protección”.

Solo el año pasado, casi 3.000 personas de las parroquias de Dublín asistieron a una formación sobre salvaguardia.

El Arzobispo también agradeció a todos aquellos feligreses “que han mantenido la fe con nosotros en este momento difícil”.

“No subestimo el dilema de los padres que quieren que sus hijos se fortalezcan en la fe pero dudan en permitir que sus hijos se involucren en las actividades de la parroquia. Les digo: sus hijos son queridos para nosotros, como lo son para ustedes, y haremos todo lo que esté a nuestro alcance para garantizar su seguridad y protección contra el abuso”.

Las prácticas que la Arquidiócesis de Dublín ha implementado en sus parroquias para mantener seguros a los niños y adultos vulnerables incluyen medidas tales como elegir cuidadosamente a quienes trabajan con niños y adultos vulnerables en las parroquias, y esto incluye investigar a los involucrados en el ministerio público; asegurar que los trabajadores y voluntarios de la parroquia se comporten apropiadamente con los niños y adultos vulnerables; hacer los arreglos adecuados para las actividades que involucren a niños y adultos vulnerables, lo que incluye garantizar la supervisión adecuada de tales actividades.