Indudablemente, el año 2020 quedará marcado en la crónica de todos nosotros. La pandemia nos marca el corazón a todos, así sea por las tristes noticias que nos llegan todos los días, o por la pérdida de un ser querido que ha fallecido.
En lo que se refiere al trabajo con la Pastoral de Acolhida, una pastoral que trabaja en la primera línea de nuestras comunidades, fue preciso cambiar, amoldar, para que la evangelización prosiguiera ocurriendo.
Justo al inicio de la pandemia, motivados por el Centro Diocesano de Pastoral, lanzamos la Campaña “Acogiendo Corazones”, que motivó a cada anfitrión a efectuar una videollamada o simple llamada a el resto fieles de su red social. En estas diálogos, el anfitrión fue causado a volver su atención a la vida de los hermanos, extendiendo su mano y sus frases, y en consecuencia incitó a otros a realizar lo mismo. Entre ellos nuestro obispo diocesano, Don Pedro Calos, presentó a todas y cada una de las hostias de nuestras comunidades una hermosa oración al servicio de la acogida.
En este momento, ya en el segundo semestre, con la reanudación progresiva de las celebraciones con presencia de fieles en nuestras parroquias, nuestra pastoral, a nivel diocesano, lanza una encuesta llamada “Acogida en tiempos de pandemia” para ver y comprender el accionar de cada comunidad, antes y a lo largo de la pandemia. Al interpretar estos signos, estas respuestas, podremos prepararnos mejor para la pospandemia, con la reanudación del trabajo. La meta es simple: Queremos comprender, acoger y orientar nuestra misión pastoral.
Solicitamos que la encuesta sea respondida con bastante cuidado y atención por los organizadores parroquiales de las comunidades donde está presente nuestra pastoral. En ausencia de un liderazgo parroquial, los otros anfitriones pueden reunirse por videoconferencia y elaborar las respuestas juntos. El resultado, un corto sentido, se presentará a principios de octubre, para que todos logren tener una pequeña iniciativa de todo nuestro trabajo pastoral en la diócesis de Beato André.
Sabemos que hay muchos desafíos por superar, el 2021 será fundamental para esto. Sabemos de que el virus no puede ser mayor que la voluntad y el coraje de evangelizar, de ser una Iglesia agradable y misionera, si bien por el momento estemos bajo reglas de seguridad, acatando el distanciamiento y consecuentemente salvando vidas.
A fin de que tengamos comunidades agradables, va a ser necesario tener una pastoral conjunta, donde todos se sientan agradables. Entonces, ¡sigamos los pasos de Jesús Acolhedor, comprometidos en acoger y llegar a todos!
Artículo de Jorge Luis – Seminarista DiocesanoMiembro de la Pastoral da Acolhida