Ave María llena eres de graciaGracias te damos, madres de todos y cada uno de los mundos
Vientres agradables de novedosas esperanzas Estímulo que nos lanza firmes En la conquista de otra vida
El Señor está contigoLa voluntad de Dios con apariencia de mujerEl anhelo divino con apariencia de ternura
Nada se eleva a tu candor
De ofrecernos el espacio en tu cuerpo Bendita tú entre las mujeres
Por el hecho de que en cada uno están todos Tu acompañamiento es el principio de mi confianza Tu confianza es el principio de mi éxito Mi éxito es el principio de tu realización.
Bendito el fruto de tu vientre: la vida, acompáñanos siempre en nuestro trabajo interior.
Santa María, madre de todos nosotros, Fuerza Femenina del Universo Creador Sé la raza humana en todas las mujeres y en todos los hombres enfermos. Interfiere a nuestro favor Que trabajemos por la victoria del amor Ahora y por toda la eternidad.
Que así sea. ¡Amén!