Los malos pensamientos pueden aparecer rápidamente y reclamar un lugar en nuestra mente, pero Dios puede eliminar esos pensamientos y reemplazarlos por buenos si nos volvemos a Él. Aquí hay 11 oraciones edificantes para los malos pensamientos.
Una oración contra la negatividadDios fiel, una persona negativa es como un címbalo que retiñe. Nadie quiere estar cerca de él/ella y él/ella irrita a todos. Temo que me estoy convirtiendo en esta persona, ya que todos mis pensamientos me llevan a la desesperación. Soy incapaz de ver lo bueno en nada. Todas mis conversaciones empeoran cuando veo todas las cosas con cinismo y sin esperanza. Señor, no quiero ser de los que viven como si no hubiera esperanza. Por lo tanto, toma este corazón negativo y arréglalo. Ayúdame a ver el bien en este mundo que proviene de Tu gracia y misericordia. Graciosamente sana mi mente para que no me consuma la negatividad. Amén.
Una oración contra los pensamientos suicidasSeñor Jesús, nos has mandado que no matemos. Sin embargo, a veces tengo pensamientos de suicidarme a través del suicidio. Estos pensamientos se aprovechan de la desgracia en mi vida. Me prometen una salida fácil y un alivio a mi angustia. Señor, protégeme de estas mentiras de los demonios. Exponga sus planes maliciosos y arroje luz sobre sus planes. Porque vienen sólo para destruir. Sus promesas están vacías. Señor, ayuda mi incredulidad y dame una fe verdadera y activa para que pueda guardarme del mal. Amén.
Una oración por la resistenciaPadre Celestial, hay temporadas en la vida donde mis pensamientos me consumen. Me hundo a mínimos que nunca imaginé posibles. Todo mi ser sufre a medida que mis pensamientos se vuelven cada vez más negativos. Me siento deprimido y desmotivado. Señor, ven a mi lado y dame la fuerza para soportar esta temporada de malos pensamientos y aflicción mental. Dame tranquilidad para salir adelante, para que pueda terminar esta carrera con fe y confianza. En tu nombre, oro. Amén.
Oración LibéramePadre Todopoderoso, los malos pensamientos corren por mi mente como un ejército devastador sobre la tierra. La resistencia es inútil. Cuanto más trato de suprimir estos pensamientos, más difícilmente tienden a manifestarse. Señor, Tú conoces la profundidad de mi lucha y lo que se necesitará para ayudarme. ¡Por lo tanto, libérame! Libera a Tu siervo de esta esclavitud mental de pensamientos negativos e impuros. Dame una mente renovada que esté incesantemente dándote gracias y alabandote. Amén.
Una oración por la iluminaciónDios de la Luz, mientras haya oscuridad en el mundo, no se puede comparar con la oscuridad en mi mente. Las malas inclinaciones y deseos consumen mis pensamientos. A pesar de mis esfuerzos, no puedo deshacerme de la oscuridad interior. Pero a través de Tu Espíritu, puedes hacer brillar Tu luz dentro de mi mente. Por eso, ilumina mis pensamientos, Señor. Purifica los recovecos de mi mente para que mis pensamientos sirvan para glorificarte y ayuden a cambiar mi actitud. En tu misericordia, oro. Amén.
Atar la oración del diabloSoberano Señor, mi Refugio, mi mente es como un patio de recreo para el Diablo y sus secuaces. Se apoderan de cada pensamiento y los explotan para que yo siga cayendo en el pecado. Me roban mi paz y mi confianza en Tu gracia. Así, ata todos los demonios que corren libres en mi mente. Desterrarlos a la oscuridad exterior donde ya no pueden influir en mí. Deseo ser conformado a la imagen de tu hijo, Jesús. Amén.
Una oración por la mente de CristoJusto Salvador, quien se une a ti en la fe te recibe en toda tu plenitud. Llegamos a ser miembros de Tu cuerpo y partícipes de Tu naturaleza divina. Señor, une mi mente con Tu mente para que empiece a pensar como Tú. Vence el control que el maligno tiene sobre mi mente. Toma cautivo y destruye todos los pensamientos de envidia, asesinato, celos y codicia. En cambio, dame pensamientos de alegría, compasión, gracia y misericordia. Dame Tu misma mente, Señor Jesús. Amén.
Una oración contra la confianza en los malos pensamientosDios amoroso, a través de la cruz de tu Hijo, Jesús, has dado a todos los hombres un nuevo corazón, mente y alma. De hecho, soy una nueva creación, pero todavía lucho con la carne en pensamiento, palabra y obra. Señor, está escrito que es una locura que un hombre confíe en sus pensamientos. Sin embargo, a través de Ti, obtenemos sabiduría para discernir entre el bien y el mal. Por lo tanto, oro para que me des este espíritu de sabiduría y discernimiento. Ayúdame a saber qué pensamientos son del abismo, para que pueda llevarlos cautivos y hacerlos obedientes a Ti por Cristo, mi Señor. Amén.
Una oración para convertir los malos pensamientos en buenos pensamientosPadre, muchas cosas malas se expresan en mi mente. Aunque no los doy a conocer verbalmente al mundo, tienen su camino en mi mente. Sin embargo, Tú eres un Dios de redención. Lo que entendemos por mal, Tú tienes el poder de usarlo para bien. Toma cautiva la negatividad que brota de mi corazón y en mi mente. Ponlos de cabeza, Señor, para que te sirvan antes que al mal. Úsalos para el bien de Tu reino. Amén.
Una oración por la pureza mentalPrecioso Espíritu Santo, nuestra inclinación al pecado no comienza en el mundo, sino en lo más íntimo de nuestro ser. El adulterio comienza con nuestra lujuria. El asesinato comienza con nuestro deseo de matar. El robo comienza con nuestra codicia. Todo esto comienza en nuestro corazón y es contemplado por nuestra mente. Por eso te ruego que purifiques mi ser más íntimo. Erradica todos los pensamientos y deseos pecaminosos y lléname de una preocupación amorosa por mi prójimo y un deseo de verlo prosperar. Lléname de tu Espíritu para que pueda guardar tus mandamientos. Amén.
Oración del Escudo PoderosoDios todopoderoso, ¿cómo escaparé de mi opresor cuando mi captor es mi mente? Porque he aquí, dondequiera que voy, va conmigo. No tengo la capacidad de dejar mi propio cuerpo o pensar fuera de mi mente. Mis pensamientos son solo negativos. Me imploran que busque el vicio e ignore la virtud. No quieren el bien de mi prójimo sino que piensan sólo en mí. Deseo desesperadamente deshacerme de este estado mental egoísta. Señor, disipa estos pensamientos malos y egoístas. Sé un poderoso escudo para mi mente. No permitas que los malos pensamientos se arraiguen, sino que planta Tus semillas de fe y virtud, para que puedan producir buenos frutos de acuerdo con Tu Espíritu. Amén.
